diariodominicano.com
El grupo que formaban además de Juan Pablo Duarte, Juan Isidro Pérez, Juan Evangelista Jiménez y el español Gregorio del Valle, fue transportado desde Puerto Plata, en la goleta «Separación Dominicana», capitaneada por el coronel Juan Bautista Cambiaso, quien llegó al Puerto de Santo Domingo, en horas de la noche.
Por Héctor Tineo Nolasco
SANTO DOMINGO, el 2 de septiembre de 1844, Juan Pablo Duarte y varios de sus compañeros trinitarios fueron traídos detenidos a la ciudad Santo Domingo.
El grupo que formaban además de Juan Pablo Duarte, Juan Isidro Pérez, Juan Evangelista Jiménez y el español Gregorio del Valle, fue transportado desde Puerto Plata, en la goleta «Separación Dominicana», capitaneada por el coronel Juan Bautista Cambiaso, quien llegó al Puerto de Santo Domingo, en horas de la noche.
Los presos fueron llevados a la Fortaleza de la Torre del Homenaje, donde quedaron en prisión hasta el día 10 de septiembre de 1844, cuando fueron deportados. En ese momento Duarte estaba afectado por una fiebre y estaba muy débil.
José Gabriel García, en el II tomo de su obra «Compendio de la Historia de Santo Domingo», anota que desde la Torre del Homenaje, Duarte «presenció la farsa ridícula con que hombres apasionados, valiéndose de ignorantes esbirros, hicieron aparecer al pueblo pidiendo con furor las cabezas de los iniciadores de su independencia, y al ejército las de los más ilustrados de sus generales, augurio fatal de la larga serie de crímenes que en nombre de entidades morales tan respetables debían realizarse en no lejano porvenir».