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NUEVA YORK, 16 jun (Xinhua) -- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que "Estados Unidos ha vuelto a la mesa" luego de la reciente cumbre del G7 en Reino Unido, sin embargo, eso choca con cuatro verdades incómodas y podría no ser suficiente para reanimar a Occidente, escribió en su columna más reciente un experto del Consejo de Relaciones Exteriores (CFR, siglas en inglés).
"En primer lugar, el orden liderado por Occidente estaba cerca de una crisis mucho antes de que (el ex presidente de Estados Unidos, Donald) Trump, desequilibrado por la creciente competencia geopolítica de China y Rusia", escribió Stewart Patrick, investigador senior de gobernanza global de la cátedra James H. Binger del CFR, en su artículo titulado "El 'regreso' de Estados Unidos podría no ser suficiente para revivir a Occidente".
Hubo una disminución de la participación colectiva en el producto interno bruto (PIB) mundial de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) de altos ingresos, así como una desilusión pública con la globalización, sobre todo después de la crisis financiera, dijo Patrick, también director del programa de Instituciones Internacionales y Gobernanza Global.
"Estas debilidades permanecen", añadió el experto.
En segundo lugar, la era Trump sembró dudas sobre el poder de permanencia global de Estados Unidos, alentando a los aliados cercanos en Europa y Asia a hacer sus apuestas contra un Estados Unidos repentinamente caprichoso, destacó Patrick, señalando que esos recelos persisten, a pesar de las garantías de Biden.
"En tercer lugar, la presidencia de Trump demolió lo poco que quedaba del consenso internacionalista bipartidista. Los demócratas y los republicanos habitan ahora en planetas diferentes de política exterior", dijo.
Finalmente, no está claro si las instituciones occidentales heredadas pueden adaptarse a los desafíos globales actuales, ya sea el cambio climático, la guerra cibernética, las enfermedades pandémicas o la dislocación económica, escribió Patrick.
Biden podría tener muchas cosas en su agenda durante su actual viaje a Europa, que incluye las reuniones del G7 y de la OTAN, pero "los retos prácticos inmediatos y las tensiones políticas internas pueden complicar estas aspiraciones", dijo.
