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Presidente colombiano ordena despliegue militar tras alteración de orden público en región del suroeste
BOGOTÁ, 28 may (Xinhua) -- El presidente colombiano, Iván Duque, anunció en la noche de hoy el despliegue militar en la ciudad de Cali y en el departamento de Valle del Cauca (suroeste), donde se alteró el orden público en el último día en el marco del paro social que esta semana cumplió un mes. "Este despliegue se hará en cabeza de oficiales de la más alta experiencia (...) Quiero dejar claro que este despliegue llevará casi a triplicar nuestra capacidad, en menos de 24 horas, en todo el departamento. Asegurando la asistencia en puntos neurálgicos", sostuvo. La declaración del jefe de Estado fue hecha tras visitar Cali, donde durante este día se presentaron fuertes disturbios que dejaron varias personas muertas. "Claramente, también la protección de los corredores (viales) del departamento. El desbloqueo como principio, el desbloqueo como medida de protección de todos los ciudadanos. Hay más de 7.000 hombres desplegados para esa labor, donde también se incluye el personal de la Armada", sostuvo. Duque afirmó que su gobierno no negociará la Constitución ni los derechos de los ciudadanos con las personas que iniciaron hace un mes un paro social. Inicialmente, el presidente colombiano anunció durante este día que no negociará con los miembros del Comité del Paro, mientras continúen los bloqueos de carreteras, que han generado desabastecimientos de alimentos y combustibles en algunas regiones, especialmente en el suroeste del país, donde está el Valle del Cauca. Las protestas se iniciaron el pasado 28 de abril, luego de que el gobierno presentó al Congreso un proyecto de reforma tributaria que buscaba aumentar los impuestos a algunos productos y servicios a raíz de la crisis generada por la pandemia de la COVID-19. Posteriormente, el presidente Duque pidió al legislativo retirar dicha reforma tributaria tras iniciarse en varias ciudades del país marchas y bloqueos de carreteras. Tras esos hechos, varios sindicatos promovieron un paro social exigiendo al gobierno mejorar el sistema de educación y salud, entre otros. Por los desmanes y enfrentamientos entre manifestantes y las autoridades han resultaron heridas unos cientos de personas y otros fallecieron. Actualmente, el gobierno mantiene negociaciones con los dirigentes del paro para levantar los bloqueos y manifestaciones.
