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MADRID, 7 may (Xinhua) -- Algunos países occidentales están decididos a demonizar a China para proteger mejor su estatus, pero esa "distracción" puede ser "funesta" si sus problemas estructurales continúan empeorando, planteó el experto en China Xulio Ríos.
Tales problemas estructurales incluyen "la pérdida de calidad democrática a manos de oligarquías que desprecian el bien común", aseguró Ríos, director del Observatorio de la Política China en España, en un artículo publicado en el sitio web de la institución el 4 de mayo.
El artículo cita datos sobre la confianza pública en el Gobierno de Estados Unidos proporcionados por el Pew Research Center, que sostiene que el 75 por ciento de la población estadounidense confiaba en su Gobierno en 1958, y la cifra se redujo al 30 por ciento en 2007 y al 12 por ciento en 2020.
Mientras tanto, en mayo del año pasado, en medio de la pandemia de la COVID-19, el Laboratorio de Datos de China de la Universidad de California descubrió que el 88 por ciento de los chinos preferían su sistema político a cualquier otro, expuso Ríos.
"Si algo ha mostrado China a lo largo de los últimos lustros es su capacidad para evolucionar diagnosticando sus problemas, ofreciendo soluciones propias y estableciendo ritmos ajustados a sus tiempos", recordó Ríos.
