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TEGUCIGALPA, 24 abr (Xinhua) -- Cientos de migrantes que se encontraban varados en Honduras, entre ellos al menos 500 haitianos, emprendieron su camino rumbo a Estados Unidos, informó hoy la vicealcaldesa de la comunidad de Trojes, en la frontera con Nicaragua, Dinora Sandoval.
"Ya se fueron, migración les ayudó", dijo Sandoval a Xinhua en una serie de mensaje telefónicos.
Hace más de una semana, unos 2.000 migrantes en su mayoría haitianos, africanos y cubanos, estaban albergados en casas, iglesias, centros comunales y escuelas en la comunidad de Trojes, El Paraíso, en la frontera con Nicaragua, en el este de Honduras.
Desde inicios de esta semana, diversos medios locales de comunicación informaban sobre la presencia masiva de indocumentados que entraron por la frontera de Nicaragua y que estaban albergados en distintos lugares de Trojes, una comunidad de unos 60.000 habitantes y que es un paso obligado para los migrantes.
Autoridades locales calcularon que unas 400 personas pasan cada día por puntos ciegos, entre Honduras y Nicaragua, rumbo a Guatemala, posteriormente México hasta llegar a Estados Unidos, donde los controles migratorios son muy fuertes.
El director de la Región Departamental de Salud de El Paraíso, Marvin Ordóñez, dijo el pasado jueves a periodistas que esta semana se conformó un equipo médico y de enfermería para darles atención a adultos y niños albergados.
"Nos hemos presentado como Secretaría de Salud, además de representantes de Derechos Humanos, la Policía, Ejército y Migración para buscar resolver la situación de los extranjeros", explicó.
Agregó que atendieron a unas 100 personas, se realizaron 153 pruebas PCR para detectar la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19) y se vacunó contra la fiebre amarilla a los migrantes procedentes de Africa, Angola, Zimbabue y Brasil.
También se les inmunizó con la vacuna contra el sarampión, la parotiditis o paperas y la rubeola, se atendieron niños, embarazadas y personas con enfermedades crónicas, a quienes se les dio medicamentos y se entregó equipo de bioseguridad.
Con la ayuda de los "coyotes" o traficantes de personas, muchos migrantes siguieron su camino, otros esperan que se organice una nueva caravana para junto a los hondureños salir en un solo bloque desde la terminal de autobuses de la norteña ciudad de San Pedro Sula para cumplir su "sueño americano".