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CEPAL insta a países latinoamericanos a mantener política fiscal expansiva para impulsar reactivación económica

diariodominicano.com

   SANTIAGO, 21 abr (Xinhua) -- La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) instó hoy miércoles a los países de la región a mantener una política fiscal expansiva para impulsar la reactivación económica y mitigar así los efectos de la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19).
   El organismo de Naciones Unidas presentó de manera virtual el informe "Panorama Fiscal de América Latina y el Caribe 2021", en el que analizó la dinámica fiscal de la región durante 2020 y los principales desafíos para este año, en un contexto de fuertes incertidumbres en torno al avance de la crisis sanitaria y económica.
   En esta línea, la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, destacó en el lanzamiento la importancia de "extender los paquetes de medidas fiscales durante 2021 ante la fragilidad del proceso de recuperación económica, y para continuar mitigando los efectos sociales, productivos y económicos negativos de la pandemia".
   Bárcena indicó que la región enfrenta dos grandes desafíos en materia de política fiscal: generar el financiamiento para mantener el gasto público y fortalecer la sostenibilidad de una política fiscal expansiva.
   "Ambos desafíos requieren repensar la orientación de las políticas de gasto e ingresos públicos'', indicó la funcionaria, quien sugirió realizar cambios a la estructura tributaria para aumentar la carga impositiva.
   En esta línea, el informe abordó los retos para fortalecer los impuestos directos, en particular el impuesto al patrimonio y su potencial para reforzar la recaudación, y la progresividad de la política tributaria en un entorno de mayores necesidades de financiamiento de los países.
   La CEPAL calificó de "imprescindible" la cooperación internacional en este escenario a través del financiamiento para el desarrollo y apoyo en ampliar el espacio fiscal en el corto y mediano plazo. Esto pasa por la "ampliación y redistribución de la liquidez global, el alivio de la deuda, fortalecer la capacidad de crédito de la banca de desarrollo y el uso de instrumentos innovadores de financiamiento", declaró Bárcena.
   En sintonía con la reactivación de la región, ella remarcó lo fundamental de "potenciar el papel del gasto público en una trayectoria de desarrollo inclusivo y sostenible", por medio de atender demandas sociales de corto plazo con inversiones sostenibles e intensivas en empleo, especialmente para mujeres, promover la transformación productiva y universalizar los sistemas de protección social.
   Según el informe, la dinámica del crecimiento en 2021 no logrará compensar la caída observada en la actividad económica en 2020, ni tampoco revertir los aumentos en la pobreza y la desigualdad.
   También cabe esperar una lenta recuperación de los niveles de empleo que no permitirá recuperar la fuerte pérdida en los niveles de ocupación ocurrida el año pasado, siendo las mujeres las más afectadas con un retroceso de 10 años en su participación laboral.
   A su vez, la persistencia de la pandemia, las asimetrías en la disponibilidad de las vacunas y las incertidumbres sobre su efectividad, junto a ritmos de recuperación económica asincrónicos y divergentes, ponen un manto de incertidumbre sobre la velocidad y sostenibilidad de la recuperación económica, enfatizó la CEPAL.
   América Latina y el Caribe es la región en desarrollo más afectada por la pandemia de la COVID-19 en 2020. Con ello, se intensificaron las brechas estructurales en materia de desigualdad, espacio fiscal limitado, baja productividad, informalidad y fragmentación de los sistemas de protección social y salud, indicó el informe.
   Agregó que para hacer frente a los efectos sociales y económicos de la pandemia, se adoptaron políticas fiscales expansivas por 4,6 por ciento del Producto Interno Bruto en promedio para los países de la región en 2020. Estos esfuerzos se dirigieron a fortalecer los sistemas de salud pública, apoyar a las familias y proteger la estructura productiva, principalmente a través de subsidios y transferencias corrientes.
   La expansión del gasto público para atender la crisis y la caída en la recaudación tributaria conllevó aumentos significativos en los déficits fiscales y en los niveles de endeudamiento en la región, alcanzando un nivel promedio de la deuda pública bruta de los gobiernos centrales de 56,3 por ciento del PIB, dijo la CEPAL.
   Asimismo, la región es una de las más endeudadas del mundo y presenta el mayor servicio de la deuda externa en relación con las exportaciones de bienes y servicios (59 por ciento), agregó.
   Previo a la presentación del informe, y en el marco del 33 Seminario Regional de Política Fiscal, se realizó el martes pasado una reunión con ministras y ministros de Hacienda de la región. En ella participaron representantes de áreas técnicas de 14 países latinoamericanos.