Washington, 8 ago (PL) El Tratado de Libre Comercio (TLCAN o NAFTA) existente entre Estados Unidos, México y Canadá, propició la mayor migración forzosa hacia el norte en toda la historia estadounidense.
La idea de que los TLC, tan alentados por la Casa Blanca, eran una bomba de tiempo para los propios estadounidenses se confirma ahora cuando millones de inmigrantes indocumentados se enfrascan en una campaña nacional para regularizar su situación.
Datos divulgados en un comentario que publica El Diario/La Prensa, de Nueva York, indican que después de suscritos los acuerdos entre los tres países solo en México se eliminaron cinco millones de empleos en la agricultura.
La gente tuvo que emigrar al norte para poder darles de comer a sus familias, señala el mayor diario hispano de la ciudad de los rascacielos y apunta que ese masivo movimiento provocó reacciones racistas encaminadas a prevenir que los no blancos se convirtieran en una mayoría en los Estados Unidos.
El comentario pregunta sobre uno de los mayores retos que ahora enfrenta la reforma de las leyes, la legalización de un estimado de 11 millones de indocumentados que ahora residen en el país.
Asimismo aborda otro de los problemas que enfrentan los inmigrantes indocumentados cuando para mantener a sus hijos «tenían que trabajar por salarios miserables y sin derechos», aspectos que aborda un plan de reforma aprobado en junio por el Senado y que la Cámara de Representantes rechaza.
El comentario coincide con la liberación este miércoles de nueve inmigrantes sin papeles conocidos como «dreamers», que fueron detenidos al intentar entrar a Estados Unidos desde México en abierto desafío a las leyes migratorias.
La acción de las cinco mujeres y cuatro hombres que ingresaron a Arizona el 22 de julio portando solicitudes de asilo, llamó la atención sobre la cifra récord de deportaciones del gobierno de Barack Obama y ahora presiona a favor de una reforma migratoria en discusión en el Congreso.
Según Christopher Bentley, portavoz de la Agencia de Migración y Aduanas hay miles de personas como ellos y millones más que han sido deportados y por quienes están luchando.
Todos estos inmigrantes son parte de la anunciada «bomba de tiempo» que desde hace años amenaza con estallar en Estados Unidos como consecuencia de una política que lejos de ayudar socava a las economías de muchas naciones latinoamericanas.
2013-08-08 19:32:38
