San Juan, 12 sep (PL) Una crisis de salubridad, que ha conllevado la muerte de una decena de pacientes en un hospital público y otras seis por la influenza, estremece hoy a Puerto Rico, mientras las autoridades intentan minimizar el problema.
El ministro de Salud, Francisco Joglar, ha tenido que reconocer que en el caso del hospital de la Universidad de Puerto Rico (UPR), en la vecina ciudad de Carolina, se saltaron los protocolos al descubrirse un brote de la bacteria Acinetobacter baumannii en la unidad de cuidado intensivo, lo que ocasionó una decena de muertes.
El alto cargo de salubridad aclaró que no se informó de la situación en la unidad de intensivo del Hospital UPR, como se le conoce, para no «alarmar» a la población, lo que ha generado críticas de diversos sectores del país, incluidos legisladores del gubernamental Partido Popular Democrático (PPD).
Mientras, la directora de la División de Epidemiología de Salud, Haydée García, trató de minimizar el asunto al sostener que «una colonización de bacterias no mata», por lo que los 10 decesos ocurridos respondieron a septicemia y shock séptico por el contagio de otras bacterias; infarto, fallo renal y hepático y complicaciones médicas por diabetes.
El total de infecciones ascendió a 35 personas, por lo que el ministro Joglar ordenó cerrar el piso cinco de la instalación médica, donde al parecer se concentró el problema.
Simultáneo con este caso, el Ministerio de Salud confirmó que suman ya seis las personas fallecidas por influenza en los pasados tres meses, previo a la temporada alta de contagio que comienza en octubre, por lo que lo que el organismo emitió un alerta para que los ciudadanos concurran a vacunarse anticipadamente.
El mayor número de muertes ocurrió en agosto, cuando fallecieron cuatro pacientes, un infante de dos meses de nacido, un varón de 46 años y las otras personas mayores de 67 años.
Joglar manifestó que se trató de «casos con múltiples condiciones», como padecimiento del hígado, asma, diabetes y obesidad, lo que hace que las personas estén a mayor riesgo de contagiarse con el virus.
Entre julio y la primera semana de septiembre, indicó el funcionario, se han infectado dos mil 411 personas, 68 de ellas en la pasada semana de influenza A.
De estos casos, mil 958, que representa el 81 por ciento, corresponden a influenza A; 416, 17 por ciento, de influenza B y 37 casos, dos por ciento, dieron positivos a influenza A y B combinadas.
Tres de las muertes ocurridas entre finales de agosto y principios de septiembre dieron positivo al virus AH1N1, subtipo que en 2009 dejó más de 50 muertes en Puerto Rico, fundamentalmente embarazadas y adultos jóvenes.
A la vez que se producen estos casos, el ministro de salubridad está a la espera de los resultados de un estudio epidemiológico acerca del modo de transmisión del Virus del Nilo debido a un aparente caso que se reportó en el vecino municipio de Bayamón.
«Estamos pendientes al resultado de la prueba, pero de resultar positiva vamos a tomar medidas adicionales», aseguró Joglar sobre una dama de 74 años que convalece hace más de tres semanas en el hospital Hermanos Meléndez, en Bayamón.
De confirmarse, dijo Joglar, este sería el primer caso de humanos confirmado en Puerto Rico, donde en años anteriores se detectó en equinos.
2013-09-12 19:48:28
