San Juan, 28 sep (PL) El arzobispo metropolitano de San Juan, Roberto González rechazó que en la Iglesia católica puertorriqueña exista contubernio para encubrir los casos de abuso sexual en que incurren miembros de la curia.
El prelado reconoció, sin embargo, que se han cometido errores en la atención de denuncias de casos de pedofilia en los que han estado involucrados sacerdotes.
Las expresiones de González se produjeron en una rueda de prensa en el Arzobispado de San Juan, luego de que saliera a la luz pública que la Diócesis de Arecibo, en el norte del país, se encuentra inmersa en un escándalo luego que se conociera que el sacerdote José Colón es investigado por pedofilia.
Aseguró que desde que se encuentra al frente del Arzobispado metropolitano de San Juan, hace 14 años, se han expulsado 32 sacerdotes de la Iglesia católica por mala conducta o situaciones de naturaleza sexual.
González instó a las víctimas de abuso sexual a acudir a las autoridades civiles para que se investiguen criminalmente los casos.
El caso de la Diócesis de Arecibo tiene ramificaciones con la destitución de Josef Wesolowski como nuncio apostólico para la República Dominicana y Puerto Rico, luego de que El Vaticano tomara conocimiento de un escándalo de abuso sexual de menores por el cual es investigado.
Wesolowski visitaba con frecuencia a Puerto Rico y llegó a pernoctar en la Diócesis de Arecibo, de acuerdo con feligreses de la iglesia San Martín de Porres, que denunciaron la conducta de Colón.
González afirmó que el obispo de Arecibo, Daniel Fernández, ha manejado adecuadamente la controversia, a la vez que ha estado asesorado por el Vaticano.
«Cada obispo ha tenido que trabajar con este tipo de situación en Puerto Rico», admitió el Arzobispo, quien por el último año fue víctima de una acción de Wesolowski, en connivencia con sectores vinculados al anexionista Partido Nuevo Progresista (PNP), que lo acusaban de impulsar una agenda separatista respecto a Estados Unidos.
El Vaticano exoneró a González justo unos días antes de que estallara el escándalo relacionado con la conducta licenciosa de Wesolowski en Santo Domingo, donde presuntamente sedujo a niños.
Ahora la Diócesis de Arecibo es investigada por la Iglesia católica debido a las denuncias de actividades sexuales que involucran a sacerdotes y seminaristas.
Informes periodísticos sostienen que por lo menos cuatro prelados fueron destituidos, se cerró el Seminario Jesús Maestro en Arecibo y fueron expulsados nueve seminaristas.
Además, esto presuntamente produjo la inmediata salida del monseñor Iñaki Mallona como obispo de Arecibo, debido a que no tomó acción con las quejas constantes que recibió.(HG).
2013-09-28 14:30:49