San Juan, 1 oct (PL) Unos diez mil empleados de agencias estadounidenses en Puerto Rico resultaron afectados por el cierre hoy del gobierno federal.
El presidente de la local de la Federación Americana de Empleados Gubernamentales (FAEG), Alejandro Alvelo, dijo que diversas dependencias federales en esta isla del Caribe enviaron a sus hogares a aquellos empleados que desempeñan funciones que no están directamente ligadas a la seguridad.
Alvelo explicó que permanecerán trabajando los empleados en puestos esenciales y que a los demás se les concedieron cuatro horas para recoger sus oficinas antes de irse a su casa a esperar que los llamen de regreso, cuando se supera la situación.
«Esto será hasta que haya presupuesto», manifestó Alvelo sobre el cierre por tiempo indefinido que afecta a la administración estadounidense y los servicios públicos.
En tanto, el jefe de la Guardia Nacional de Puerto Rico, general Juan Medina Lamela, reveló que 600 de los 800 empleados de esa fuerza militar se han afectado con el cierre del gobierno federal, debido a la pretensión de los republicanos de obstruir la reforma de salud de la administración del presidente Barack Obama.
El alto oficial expresó que tras reducir su fuerza laboral la Guardia Nacional, compuesta por ciudadanos-soldados y aviadores tradicionales junto a militares activos, mantendrá los servicios esenciales sin que se afecte el aspecto de la defensa.
«El cierre del gobierno federal ha afectado la fuerza laboral, ya que por las provisiones legales no pueden trabajar mientras dure esta situación», explicó el General y apuntó que se perjudicarán principalmente los servicios dirigidos a aquellas áreas consideradas no esenciales para las funciones diarias del cuerpo cdastrense.
«Además de los 600 empleados que se verán afectados también figuran sobre 100 contratistas del gobierno federal que laboran con nosotros», dijo.
La Guardia Nacional se mantendrá vigilante, pues «continuamos ejecutando nuestras misiones, proveyendo seguridad a través de la opreración Escudo Costero y manteniéndonos en alerta siempre ante cualquier situación que requiera nuestra intervención, como lo hemos hecho por más de 94 años».
Además, más de 250 empleados del fuerte Buchanan, en el vecino municipio de Guaynabo, permanecerán en sus casas hasta que se supere el impasse en Washington, dijo la portavoz de esa fortaleza militar, Griselle Rosa. Advirtió que se mantendrán «las actividades destinadas a proteger vida y propiedad».
2013-10-01 20:41:00
