Internacional

John Kerry advierte que los terroristas pueden huir, pero esconderse; no habrá tregua con ellos

Washington DC 7 octubre.- Estados Unidos prometió ayer domingo seguir combatiendo sin tregua a los extremistas, tras dos operativos especiales contra jefes islamistas sospechosos de actos terroristas, uno en Libia, donde fue capturado un presunto miembro de Al Qaida, y otro en Somalia, contra un jefe de los shebab.

En Libia, las autoridades exigieron una explicación sobre lo que calificaron como el «secuestro» de Abu Anas al Libi, uno de los presuntos líderes de Al Qaida, buscado por Estados Unidos que lo acusa de haber jugado un papel clave en los atentados contra sus embajadas en Tanzania y Kenia en 1998.

Somalia tuvo una reacción más positiva: el primer ministro Abdi Farah Shirdon dijo que su gobierno cooperaba con sus «socios extranjeros en la lucha contra el terrorismo» y que esa cooperación «no era un secreto», luego de la operación el sábado de comandos de los Navy SEAL contra un líder islamista de los shebab, connexos con Al Qaida, en el puerto de Barawe (sur).

Ese golpe, del que todavía se desconocen detalles como la situación de la persona que era buscada, se produjo un mes después del ataque a un centro comercial de Nairobi por parte de esas milicias islamistas, que dejó 67 personas muertas.

«Estas operaciones en Libia y Somalia envían un fuerte mensaje al mundo de que Estados Unidos no ahorrará esfuerzos en hacer justicia con los terroristas, no importa dónde se escondan o por cuánto tiempo logren evadir la justicia», dijo el secretario de Defensa, Chuck Hagel, en un comunicado.

2013-10-07 14:02:42