Naciones Unidas, 27 ene (PL) Naciones Unidas advirtió hoy que en los últimos días aumentaron las víctimas civiles y los desplazados en la República Centroafricana, por la continuidad de los choques armados entre milicias musulmanas y cristianas.
La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, señaló que pese a los llamados de la presidenta interina, Catherine Samba-Panza, a detener la violencia, los enfrentamientos intercomunitarios prosiguen en la capital Bangui y otras partes del país, agravando la crisis.
«La seguridad y la situación de los derechos humanos siguen su deterioro y muchas vidas están en peligro, por lo que llamamos con urgencia a la comunidad internacional a fortalecer sus esfuerzos de paz», dijo en un comunicado.
Pillay en particular mencionó los choques entre grupos armados ex-Séléka (musulmanes) y anti-Balaka (cristianos), que desde el 21 de enero han dejado muertos en diversos barrios de Bangui, los cuales sufren el pillaje impune contra viviendas, comercios y mezquitas.
Además, los combates obligaron a civiles y milicianos musulmanes a desplazarse hacia las cercanías de la frontera chadiana, precisó.
Según la funcionaria, en el poblado de Bouar el escenario es muy complejo, al punto de quedar desierto, pese a la presencia de tropas foráneas.
La preocupación crece, porque al incremento de los grupos armados se suma el auge de la criminalidad, expuso.
El conflicto en la República Centroafricana estalló a finales de 2012, con los agravantes de marzo último, cuando los entonces rebeldes Séléka dieron un golpe de Estado que derrocó al presidente Francois Bozizé, y de principios del pasado mes, con la escalada de los combates y actos de venganza entre musulmanes y cristianos.
Desde el comienzo de la crisis, Naciones Unidas estima que miles de personas murieron y casi un millón dejaron sus hogares, mientras que alrededor de la mitad de la población centroafricana -dos millones 200 mil seres humanos- necesitan ayuda.
La Organización ha pedido a la Unión Africana fortalecer su misión en el terreno (Misca), a la que acompañan tropas de intervención francesas. De acuerdo con investigaciones de la ONU, algunos militares extranjeros se han involucrado en violaciones de los derechos humanos.
Esas propias pesquisas reflejaron que la situación en el país es caótica, a partir de los asesinatos extrajudiciales, desapariciones y desplazamientos forzados, abusos sexuales, saqueos, incendios de poblados y reclutamientos de miles de niños soldados.
Ante tal escenario, Naciones Unidas anunció la semana pasada el establecimiento de una Comisión Investigadora para identificar violaciones de las leyes internacionales y los derechos humanos en el conflicto.
2014-01-27 20:21:11
