Internacional

Los efectos de las deportaciones en EE.UU

Por BBC Mundo

Los activistas exigen que el gobierno de EE.UU. no deporte a los padres de familia que no hayan cometido delitos graves. (Arhicvo).»Deporter in Chief» (Deportador en Jefe). Ese es el apodo que las organizaciones de defensa de los derechos de los inmigrantes, que trabajan para que salga adelante una reforma migratoria en Estados Unidos, le han puesto al presidente Barack Obama.

Y es que desde que Obama llegó a la Casa Blanca en enero de 2009, alrededor de dos millones de indocumentados han sido expulsados del país, más que durante cualquier otra presidencia en la historia de la nación norteamericana.

El mandatario se ha defendido asegurando que lo único que está haciendo es cumplir la ley y ha culpado a los republicanos de que -en contra de lo que él mismo había prometido a sus votantes de origen hispano- el Congreso de su país todavía no haya aprobado una reforma.

Pero detrás de las maniobras y los intereses políticos, se encuentra la historia de los miles de hogares que deben hacer frente a la realidad de que uno de sus miembros haya sido deportado.

Los cifras oficiales indican que en muchos casos los que son expulsados del país son padres de familia que sostienen económicamente a los suyos y que, al abandonar a la fuerza en núcleo familiar, dejan a sus esposas e hijos a su suerte.

Ello hace que el precio de la desintegración de las familias lo acaben pagando las mujeres, que deben enfrentar las penurias económicas y el estrés emocional que conlleva perder a sus maridos y tener que hacerse cargo ellas solas de sus hijos.

2014-04-27 05:57:44