Beijing, 7 jul (PL) El presidente chino, Xi Jinping, criticó hoy los intentos de autoridades japonesas de cambiar la historia al referirse a la invasión nipona en 1937 a su país.
En un discurso en el Museo de Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa, Xi aseguró que los hechos son los hechos y no se puede ignorar a las decenas de millones de personas que sacrificaron sus vidas por repeler a los militares invasores.
Una minoría de políticos japoneses negó en repetidas ocasiones o incluso trató de embellecer la historia de la agresión, aunque el pueblo chino recuerda los tormentos de la guerra, de ahí su vocación por la paz.
«La historia nos dice que cualquier agresión está condenada al fracaso», acotó el presidente de China.
El pueblo chino sigue el camino del desarrollo pacífico, en la esperanza de que todos los países adopten el mismo camino», precisó.
Los militares japoneses invadieron el noreste de China, en septiembre de 1931, empero los historiadores coinciden en que la de gran escalada ocurrió el 7 de julio de 1937, tras un asalto al puente Lugou, un acceso clave de Beijing.
La acción de los soldados nipones provocó que todos los grupos étnicos, clases, partidos, organizaciones sociales y patriotas chinos, así como de Hong Kong, Macao y Taiwán, se unieran para rechazar al invasor, indicó Xi.
El Presidente develó una escultura conmemorativa del inicio de la Guerra de Resistencia de China contra la Agresión Japonesa, en una ceremonia a la que asistieron unas mil personas, entre ellas veteranos de aquella guerra e integrantes de las nuevas generaciones.
La escultura honra a quienes dedicaron su vida a luchar por la independencia nacional y la libertad, así como a los contribuyentes a la paz y la justicia, subrayó Xi Jinping.
2014-07-07 17:50:39