Naciones Unidas, 25 sep (PL) El primer ministro británico, David Cameron, intentó hoy justificar la futura participación de su país en los bombardeos en Iraq y Siria con el anunciado propósito de combatir al grupo radical sunita Estado Islámico (EI).
Cameron afirmó que su nación esta lista para cumplir su papel en las acciones contra el EI, al intervenir en la 69 sesión de la Asamblea General de la ONU y en vísperas de la discusión de ese asunto en la Cámara de los Comunes.
El Primer Ministro afirmó que el EI es un mal contra el cual debe unirse todo el orbe, un llamado ausente en Londres ante denuncias de Damasco sobre las atrocidades y atentados cometidos por grupos armados en Siria, financiados y pertrechados desde el exterior.
Durante su alocución, Cameron consideró que los errores del pasado de ninguna forma pueden ser una excusa para la inacción, en referencia a la participación de tropas de Reino Unido, junto a las estadounidenses, en la agresión contra Iraq, en marzo de 2003.
Para enviar fuerzas armadas a suelo iraquí, el entonces primer ministro Anthony Blair presentó argumentos falsos ante el legislativo para convencerlo de la necesidad de la citada invasión.
Además, el jefe de Gobierno conservador intentó conceder un viso legal a las acciones lanzadas desde inicios de esta semana por el Pentágono contra el EI, ante los reclamos de Rusia de que ello necesita una aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU.
En su discurso, Cameron se refirió a un supuesto «claro pedido» del gobierno de Bashar Al Assad para una asistencia militar contra el EI que ocupa parte del norte de Siria, aún cuando la Cancillería de ese país nunca emitió un comunicado oficial al respecto.
Para el dirigente conservador, ello justifica una supuesta base legal para lanzar la mencionada ofensiva aérea.
Al mismo tiempo, el primer ministro británico estimó que Occidente debe evitar el envío de tropas terrestres a las zonas de combate en Iraq y Siria, y en su lugar aconsejó entrenar, equipar y apoyar a las fuerzas iraquíes y kurdas en el frente de batalla.
Londres, como Washington, suministró pertrechos a formaciones armadas, que calificó de oposición moderada, en Siria, sin atender a las denuncias de Damasco de que libraba una lucha contra el terrorismo, ante una prolongada indiferencia de Occidente.
2014-09-25 18:10:26