París, 7 oct (PL) El ministerio francés del Interior estudia hoy la posibilidad de equipar a las fuerzas de la policía con aparatos aéreos no tripulados, de los denominados drones, una idea que genera preocupación entre los especialistas.
La iniciativa está en fase de experimentación en el centro de Saint-Astier, ubicado en el departamento de Dorgogne, donde los agentes se adiestran con tres de estos equipos, que pueden volar a tres mil metros de altura durante dos horas consecutivas.
De acuerdo con Christophe Crepin, miembro de uno de los sindicatos representados en las fuerzas del orden, los drones podrían utilizarse para vigilar manifestaciones, luchar contra el crimen organizado o acceder a lugares inhóspitos.
El tema, sin embargo, despierta varias inquietudes vinculadas sobre todo con la seguridad y el derecho a la vida privada de los ciudadanos.
Mal controlados, los equipos pueden interferir con otros aparatos, como helicópteros o aviones en fase de despegue o aterrizaje e, incluso, causar daños si caen accidentalmente en sitios urbanos.
Además, al estar equipados con cámaras de fotografía y video de alta sensibilidad y receptores de sonidos, se corre el riesgo de atentar contra la vida privada.
En la actualidad no existe ninguna reglamentación específica en este último aspecto, dijo al diario Le Fígaro Betty Sfez, especialista en cuestiones de derecho vinculadas con las nuevas tecnologías.
Respecto al costo económico, se calcula en 108 millones de euros la inversión necesaria en los próximos tres años para contar con los drones suficientes, de tal manera que el sistema sea operativo.
2014-10-07 17:41:33
