

Acapulco, México DF 11 noviembre.- El gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, que no había enfrentado una dificultad de hondo calado durante el año y medio que ha estado en su cargo, de repente está sorteando múltiples crisis.
La administración tuvo dificultades para responder a crecientes cuestionamientos sobre una mansión comprada por la primera dama a un contratista del gobierno y ha tratado sin mucho éxito de apaciguar las protestas por la desaparición y probable muerte de 43 estudiantes normalistas.
Aunque las autoridades han ofrecido indicios de que fueron asesinados y calcinados, los familiares no quieren aceptar que los restos quemados y la ceniza encontradas en varias bolsas en un río cercano al lugar de la desaparición sean los de los estudiantes.
La fiscalía tampoco lo declara de manera oficial. En estos meses de gobierno, el mandatario había tratado de cambiar el discurso oficial del país para alejarlo de la sangrienta lucha que se libra en contra el crimen organizado y centrarlo en una serie de reformas políticas y económicas que su administración logró aprobar en el Congreso.
2014-11-11 16:41:15