Buenos Aires, 19 mar (PL) La presidenta argentina, Cristina Fernández, aclara que prefirió estar en privado con los familiares de las víctimas del atentado a la embajada de Israel en Buenos Aires en vez de acudir hoy a un acto público.
En un extenso escrito bajo el título «Crónicas de vida. Entre risas y lágrimas un solo homenaje», que divulga en su página en Internet y sus cuentas en Twitter y Facebook, la mandataria precisa por qué decidió no acudir al homenaje que organiza esa misión diplomática.
La Presidenta adjuntó la carta de respuesta en la que declinó la invitación y agregó: «Les dije a los que me acompañaban ayer que en verdad, para mí, había un solo homenaje: el día 17 de marzo y junto a ellos, las víctimas y los familiares».
Ese día de 1992 a las 14:47, hora local, aconteció la voladura del edificio de la embajada, con saldo oficial de 22 muertos y 242 heridos, que 23 años después siguen esperando respuesta sobre los verdaderos perpetradores y autores intelectuales de tal masacre.
En su nota, Cristina Fernández describe en detalles su encuentro con los familiares el pasado martes en el despacho presidencial al que asistieron los abogados de la querella Rita Jana e Ignacio Irurzun.
Estos comentaron en la reunión en la Casa Rosada que el Estado de Israel jamás se presentó como querellante en la causa de la embajada, contó la gobernante.
«Te digo que, a esta altura, pocas cosas me sorprenden. Esta es una. Otras que me contaron, mejor ni repetirlas,» escribió.
La embajada pospuso para este jueves el acto recordatorio por las elecciones en Israel.
Los familiares de la víctimas y los sobrevivientes efectuaron no obstante el día 17 un solemne homenaje, y posteriormente fueron a la Casa Rosada donde los recibió la Presidenta.
En ese sencillo tributo en la Plaza Seca, como se nombró al sitio donde estuvo la sede diplomática, reclamaron una vez más justicia.
Fue una actividad informal. El único orador fue el sobreviviente Jorge Cohen, agregado de prensa de la embajada al momento del atentado, quien destacó que aún esperan «saber quiénes fueron los responsables materiales y políticos, quiénes fueron los que decidieron hacer estallar» el edificio.
Después acudieron a la Casa Rosada donde los recibió la Presidenta.
Hubo tres líneas de investigación, una por la CIA, otra por el servicio secreto israelí Mossad y la tercera que realizó la Corte Suprema de Justicia de Argentina. En esta la pesquisa pasó por las manos de cuatro jueces de instrucción y varias conformaciones diferentes del tribunal.
Se valoraron varias hipótesis, hubo cuestionamientos y en 1997
la causa fue encomendada al secretario Esteban Canevari, quien concluyó que el gobierno de Irán era el responsable político del ataque. Además se declaró que el coordinador había sido Imad Mugniyah, líder de Hezbollah.
Desde entonces la causa está prácticamente cerrada.
Incluso, en Alemania fue arrestado Moshen Rabbani, quien se desempeñaba como el encargado cultural de la embajada iraní en Buenos Aires y figuraba entre los acusados, pero luego fue liberado por falta de pruebas.
2015-03-19 13:48:28
