BOGOTA, 8 may (Xinhua) — El ministro del Interior de Colombia, Juan Fernando Cristo, calificó hoy de «macabra» la acción de exhibir en una escuela a un soldado mutilado por una mina antipersona en la región de Catatumbo Norte, en el departamento de Santander.
Sostuvo a la prensa local que este hecho realizado por integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) «merece el repudio de toda la sociedad» y es «inaceptable».
«Desafortunadamente hay una intensa actividad militar en especial en el Catatumbo y uno realmente duda mucho de la voluntad de paz del ELN», dijo.
Recordó que desde junio de 2014, el gobierno colombiano y el grupo armado se encuentran en una fase exploratoria tendiente a iniciar un proceso de paz.
El ministo también se solidarizó con la familia del cabo mutilado, quien fue exhibido públicamente en las instalaciones de un colegio.
A su vez, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, afirmó desde México que mostrar a este militar en esas condiciones es un acto de «barbarie que raya con lo demencial».
«Poner minas es un acto de salvajismo, que además viola todas las reglas del derecho internacional humanitario», expresó el mandatario.
Pidió también al ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, que redoble la ofensiva en contra del ELN, el segundo grupo armado en el país sudamericano.
Por su parte, el ministro Pinzón pidió a la comunidad de Catatumbo aportar cualquier información que permita ubicar a los presuntos responsables.
La tragedia ocurrió cuando el cabo primero Edward Orlando Ávila Ramírez, de 26 años, terminaban la verificación y dio un paso que lo empujó. «Lo único que recuerdo es la explosión, ver mis pies destrozados y el esfuerzo de mis compañeros para sacarme del sector», dijo el soldado.
La explosión se dio a pocos metros de donde había población civil y, lamentablemente, los espectadores fueron varios niños y niñas que se encontraban curioseando la obra. «Todo pasó en el casco urbano de Convención, los niños tuvieron que presenciar esa escena tan trágica, tan triste», relató el soldado.
Entonces, los compañeros del cabo lo llevaron al Hospital de esa localidad para que el personal médico le prestara los primeros auxilios mientras llegaba apoyo aéreo. Consciente durante todo el tiempo, al llegar a la clínica Chicamocha en Bucaramanga le amputaron lo que quedaba de sus pies.
2015-05-08 18:31:52
