Naciones Unidas, 16 jun (PL) La Unión Europea (UE) insiste en su política de cierre de fronteras para lidiar con la migración irregular, una postura que solo sirve para disparar el lucrativo negocio del contrabando humano, advirtió hoy un experto de Naciones Unidas.
Según el relator especial de la ONU para los derechos humanos de los migrantes, François Crépeau, el bloque comunitario y sus estados miembros deben reconocer que el fenómeno de la migración ilegal es resultado de las políticas prohibitivas ante el flujo de personas.
Si Europa insiste en destinar la mayoría de sus recursos a la seguridad, fracasará en su intento de derrotar a los contrabandistas, cuyo modelo de negocio se basa en aprovechar las barreras a la movilidad, señaló en el Consejo de Derechos Humanos, en Ginebra, donde presentó su más reciente reporte sobre el tema.
El experto abogó por el impulso en el viejo continente al uso de los canales oficiales para la entrada y la permanencia de seres humanos en sus países.
«Los migrantes llegarán, no importa de qué manera. La UE solo recuperará el control de sus fronteras si maneja adecuadamente la cuestión de la movilidad», opinó.
Crépeau presentó su informe en un contexto marcado por el auge en la llegada de los migrantes ilegales a Europa, la mayoría procedentes de naciones de África y Asia azotadas por sangrientos conflictos y la pobreza.
Particular preocupación genera la ruta del mar Mediterráneo, donde cientos de personas han perdido la vida este año en su intento de alcanzar las costas de Italia, Grecia y otros estados.
La respuesta de la UE al problema del flujo ilícito de seres humanos, la muerte de muchos de ellos por las insuficientes acciones de búsqueda y rescate, y el contrabando fue potenciar la seguridad.
Para Crépeau, la vida ha demostrado que resulta imposible cerrar las fronteras, política que empodera a los traficantes.
Urge lidiar con el problema a partir de posturas regidas por el respeto a los derechos humanos y la movilidad, solo así podrá combatirse de manera efectiva el contrabando, dijo.
El relator especial recordó que en 2014 arribaron por mar a Europa más de 200 mil personas, comparadas con las 80 mil de 2013.
En los primeros cinco meses de este año la cifra ya superó los 100 mil migrantes y buscadores de asilo, acotó.
La víspera, el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, demandó respeto para los migrantes y el cese de la discriminación que con frecuencia sufren en el planeta.
Ellos tratan de escapar de conflictos, persecución, pobreza (…), y con demasiada frecuencia encuentran más explotación, discriminación y violencia, además de duras medidas de control a la entrada», advirtió en la primera jornada de la 29 Sesión Regular del Consejo de Derechos Humanos, prevista en Ginebra hasta el 3 de julio.
Zeid criticó la demonización del fenómeno de los migrantes y del mito de que constituyen una carga, cuando en realidad son fuerza de trabajo, consumidores y pagadores de impuestos.
2015-06-16 14:01:39
