Washington, 24 jun (PL) La campaña de la coalición militar liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico (EI) está hoy bajo la mira crítica de congresistas y expertos en temas castrenses, que coinciden en calificarla de lenta e inútil.
Para el legislador republicano John McCain, presidente del Comité de Servicios Armados del Senado, estas operaciones en Iraq y Siria son totalmente inefectivas porque el 75 por ciento de los aviones que despegan para cumplir misiones de combate regresan a sus bases sin atacar los blancos indicados.
Entretanto, la miembro de la Cámara de Representantes y correligionaria de McCain, Martha McSally, excoronela de la Fuerza Aérea, señaló que el Pentágono no está obligado a evitar a toda costa las bajas civiles, porque según ella esta es una restricción operacional extrema que dificulta el cumplimiento de las tareas asignadas.
La senadora republicana Kelly Ayotte también criticó la efectividad de la campaña aérea contra los fundamentalistas, al señalar que apenas se hacen efectivas a diario el 30 por ciento de las misiones, y eso debe ser analizado con detenimiento.
Otra de las dificultades que enfrenta esta contienda es que no cuenta con efectivos militares en tierra que indiquen a los pilotos los objetivos que deben batir tras determinar in situ dónde están las agrupaciones de los fundamentalistas, destaca este miércoles un artículo del diario The Hill.
Según el periódico, el general retirado de la Fuerza Aérea Dave Deptula, veterano de las guerras en Iraq y Afganistán, lamentó que se realicen muy pocos ataques, y en ese sentido recordó que como promedio las fuerzas de la coalición ejecutan 12 golpes diarios, lo que resulta insignificante si se compara con operativos similares.
En la operación Tormenta del Desierto en 1991 contra Iraq, hubo como promedio mil 241 salidas de la aviación de combate por día, mientras en los días iniciales de la contienda en Afganistán el promedio fue de 86 cada jornada.
Por otra parte, el EI adquirió experiencias en esta guerra aérea, y por ejemplo dejó de trasladar sus agrupaciones en grandes caravanas, además de que comenzó a utilizar con mayor frecuencia los túneles y refugios para eludir los ataques.
Hasta la fecha, Estados Unidos y sus aliados realizaron más de cuatro mil 760 ataques aéreos contra agrupaciones del EI en Siria e Iraq, a un costo superior a los nueve millones de dólares diarios y el total erogado asciende a más de dos mil 740 millones.
Washington comenzó estos bombardeos en Iraq el 8 de agosto de 2014 junto a Australia, Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Jordania, los Países Bajos y el Reino Unido.
La operación se extendió a suelo sirio el 23 de septiembre pasado sin la anuencia del Gobierno de Damasco, y en esta nación árabe el Pentágono lleva a cabo las acciones junto a medios aéreos de Bahrein, Canadá, Jordania, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos.
2015-06-24 13:29:54