Juba, 18 ago (PL) El gobierno sursudanés rechazó la firma de un acuerdo de paz con la oposición que pondría fin a la guerra civil en ese país, indicó hoy una fuente oficial.
Michael Makuei, ministro de Información de Sudán del Sur, informó este martes que el presidente Salva Kiir regresó a Juba luego de concluir en Etiopía una ronda de conversaciones, tras rechazar un pacto aprobado en la noche del lunes por el líder de las fuerzas opositoras, Riek Machar.
Kiir señaló en el transcurso de las negociaciones que las divisiones entre los enemigos de su gobierno restaban credibilidad a la firma de un acuerdo de paz con Machar.
El pasado jueves el general rebelde sursudanés Peter Gatdet rechazó el plan para finalizar el conflicto, el cual establece la creación de un gabinete de transición en su país integrado por representantes gubernamentales y de la oposición.
Gatdet indicó que decidió romper con el exvicepresidente Machar a quien le planteó que debía negarse a aceptar la fórmula presentada por organismos regionales para integrar un gobierno conjunto con Kiir.
El general expresó que en todo caso, de instalarse ese gobierno provisional, debe estar compuesto por altos jefes militares de ambas partes, que garanticen la realización de elecciones en las que participen todas las fuerzas políticas.
El 6 de agosto delegados del gobierno y de las fuerzas opositoras de Sudán del Sur iniciaron en la capital etíope, Addis Abeba, las conversaciones y debían llegar antes del 17 de agosto a un acuerdo para detener la confrontación armada que desde hace 19 meses afecta a ese país africano.
El diálogo fue promovido por la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD), organización subregional que intercede entre los dos enemigos.
La IGAD propuso una fórmula de gobierno de transición con el 53 por ciento de los cargos ministeriales para el presidente Kiir y el 33 para las fuerzas opositoras que encabeza Machar.
El restante 14 por ciento de los cargos se debía distribuir, según esa iniciativa, a partes iguales entre los exdetenidos (presos políticos de Kiir) y otros partidos.
Esa organización subregional, integrada por Djibouti, Eritrea, Etiopía, Kenya, Somalia, Sudán y Uganda, a la cual también pertenece Sudán del Sur, amenazó a los beligerantes con aplicar medidas punitivas al no llegar a un acuerdo en el plazo fijado.
La gestión de la IGAD cuenta con el apoyo de Argelia, Chad, Nigeria, Rwanda, Sudáfrica, China, Gran Bretaña, Estados Unidos y Noruega, además de otras organizaciones como Naciones Unidas y la Unión Africana.
La guerra civil en Sudán del Sur comenzó en diciembre de 2013 cuando Kiir acusó al entonces vicepresidente Riek Machar de planificar un golpe de Estado, tras lo cual se desataron enfrentamientos con un saldo de 50 mil muertos y dos millones de desplazados.
2015-08-18 13:30:33