SANTIAGO, 12 dic (Xinhua) — La presidenta chilena Michelle Bachelet reconoció que a su gobierno le ha costado presentar con claridad los conceptos de las reformas estructurales (Tributaria, Educactiva, Laboral) y la Nueva Constitución.
Bachelet admitió que su gobierno pudo hacer «un trabajo prelegislativo más importante para que los parlamentarios tuvieran más información» en los trabajos de debate sobre el tema de las reformas, según una entrevista publicada hoy por el diario local «El Mercurio».
Estas reformas constituyen los cambios más profundos desde el retorno a la democracia en Chile en 1990, tras el fin del régimen militar, los cuales se incluyeron en el Programa de Gobierno de Bachelet para reducir la desigualdad social del país.
«Ha costado instalar más claramente las reformas con sus conceptos (…) ha sido difícil desinstalar algunas argumentaciones que ha colocado gente que está en contra (…) No hemos sido capaces de instalar suficientemente los beneficios», añadió en referencia a los empresarios y partidos de derecha.
Descartó sin embargo que haya habido improvisación.
«Para ser franca, más bien creo que esa es una argumentación política para debilitar al gobierno», indicó.
Sobre la frase empleada por su gobierno para impulsar las reformas estructurales «realismo sin renuncia», que alude a una situación económica más compleja de lo que se pensó, la jefa de Estado dijo que algunos les gustó y a otros no.
La mandataria dijo también que su segundo mandato ha sido más difícil que el primero (2000-2006), sobre todo en el sentido familiar, por el caso que involucró a su hijo, Sebastián Dávalos, quien renunció al cargo de director Sociocultural de La Moneda tras conocerse que su esposa, Natalia Compagnon, consiguió un crédito millonario para comprar terrenos.
2015-12-12 20:21:19