Puerto Príncipe, 18 dic (PL) El presidente haitiano, Michel Martelly, creó por decreto una Comisión Electoral de Evaluación (CEE) con la que dice buscar una salida a la crisis asociada a los comicios que hoy vive el país.
Se trata de un comité de cinco miembros encargado de identificar y recomendar las medidas que deben adoptarse para garantizar la transparencia, credibilidad y legitimidad del actual proceso electoral.
El decreto designa como integrantes de la CEE a Rony Desroches, director de un grupo de observadores haitianos; y al miembro de la Conferencia Episcopal, Patrick Aris, crítico con las elecciones.
También incluye al exalcalde capitalino, Joseph Emmanuel Charlemagne, y a dos miembros más: Euvonie Georges Auguste y Anthony Pascal.
Asimismo establece que los dos candidatos que pasaron a la segunda ronda presidencial del 27 de diciembre, el oficialista Jovenel Moise y el opositor Jude Celestin, podrán designar a sendos observadores.
Según Martelly, la CEE será asistida además por expertos de la Unión Europea (UE) y observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), para colaborar en el cumplimiento de su misión.
Poco antes, el primer ministro haitiano, Evans Paul, propuso al mandatario crear una comisión que en tres días debía hacer recomendaciones al Consejo Electoral Provisional (CEP) y al gobierno.
La propuesta de Paul fue rechazada por los ocho candidatos presidenciales opositores que cuestionan la legitimidad de los resultados emitidos por el CEP.
Ese grupo, conocido como el G8, dijo que con ello Paul intentaba sustituir la comisión independiente de verificación propuesta por ellos para auditar los comicios haitianos y determinar si hubo fraude.
Los opositores calificaron aquella propuesta de maniobra de las fuerzas antidemocráticas gubernamentales para suplantar una comisión independiente por otra compuesta por partidarios del régimen.
Ante la CEE creada por Martelly, el G8 anunció que se reunirá para adoptar formalmente una posición sobre el tema e insistió en que la renuncia del CEP es necesaria hoy más que nunca.
En tanto, los 10 senadores que aún mantienen sus puestos denunciaron en un comunicado el carácter unilateral de la decisión de Martelly y consideraron que no contribuirá a solucionar la crisis.
Poco antes los senadores solicitaron a Martelly suspender el proceso hasta esclarecer las acusaciones de fraude e irregularidades en las elecciones del 25 de octubre.
2015-12-18 12:38:11