Dominicana Hoy

Familiares, periodistas y amigos despiden con honores a don Rafael Molina Morillo

Santo Domingo, R. D., 4 de abril, 2017.- Hoy fue la última visita y a las vez despedida de don Rafael Molina Morillo del periódico El Día, la cual quedará grabada eternamente en la mente y el corazón de todos sus compañeros de labores en este diario y de toda una sociedad que hoy lamenta profundamente la partida de un hombre que hasta el último día de vida ejerció el periodismo con firmeza, ética, valentía y entrega.

Los restos de quien en vida fuera uno de los más influyentes periodistas y directores de medios de comunicación en el país, recibieron una amplia demostración de cariño y afecto por parte no solo de su familia, sino de todos sus discípulos, de todos aquellos que de una u otra forma aprendieron de las enseñanzas de un maestro que tuvo una trayectoria impecable.

Tres carpas blancas ubicadas en la explanada frontal de los periódicos del Grupo de Comunicaciones Corripio acogieron a periodistas, dirigentes políticos, catedráticos y personalidades de la vida pública, quienes con el rostro compungido le dieron el último adiós a una gloria del periodismo.

Don José Luis Corripio Estrada, la vicepresidenta Margarita Cedeño de Fernández, los directores de el «Hoy» y EL Nacional, Bienvenido Álvarez Vega y Bolívar Díaz, rindieron guardia de honor ante el féretro con los restos de Molina Morillo.

La familia

Su hijo José Antonio Molina dio las gracias a los presentes. Resaltó las cualidades de su padre, su sentido del humor, su sabiduría y la capacidad para recriminar sin alzar la voz.

«Él era el mejor esposo, el mejor papá, el mejor abuelo, el mejor ejemplo de vida. Para Francia (su esposa) Rafelito era su compañero de vida, inseparable de su lado desde que se casó con él a los 18 años en La Vega hasta este momento. Era periodista luchador, defensor empedernido de la libertad de expresión, que curiosamente le reclamaba a Francia a menudo, que en las reuniones de familia no lo deban hablar porque él no subía la voz ni discutía», expresó José Antonio.

Asimismo, destacó la honradez de su padre, su optimismo.

«Rafael Molina era tolerante con las opiniones de los demás, aunque difícilmente cambiaba la suya», dijo José Antonio.

Molina Morillo dejó para la familia una carta escrita en septiembre del año pasado en su inseparable Mac para ser leída luego de su muerte. Era una carta de despedida llena de instrucciones y detalles de cosas que debíamos hacer, y de mucho amor, que concluía así:

«Les pido que: Cuiden a ese ángel que se llama Francia. Júntense siempre y manténganse unidos. Así era Rafelito», decía la carta.

De su lado, Corripio Estrada dijo que Molina Morillo deja una huella indeleble en la sociedad y en el periodismo.

«Todo empezó aquí y todo termina aquí. Pocos saben que él en cierta forma, incluso el murió y quizá no lo supo, él fue el creador del Grupo de Comunicaciones Corripio, más que quien les habla, él fue quien abrió la puerta para la creación de este grupo», indicó.

El doctor Rafael Molina Morillo será recordado por la sociedad como un ícono del periodismo, aborrecedor de las injusticias y un defensor de la libertad de expresión.

El subdirector de El Día, José Monegro, expresó que «cada vez que se abre una página del Periódico El Día se abren los principios de Molina Morillo y por la eternidad esas normas y esos principios éticos perdurarán. Gracias a Dios por habernos permitido tener a Molina Morillo con nosotros».

Fuente: Periodico El Día

2017-04-04 15:26:23