MLB, 5 de oct, – Los fanáticos de los Yankees estaban diciendo que querían enfrentarse a los Medias Rojas incluso antes de que le ganaran el Juego del Comodín de la Liga Americana a los Atléticos. Hasta los Patirrojos escribieron en su cuenta de Twitter el miércoles, una vez terminó el encuentro, «Queremos a Nueva York».
Bueno, los deseos se hicieron realidad. Aquí está la serie que todos querían. Y no nos referimos sólo a los fanáticos de esos dos equipos. Este era el enfrentamiento que querían todos aquellos que realmente aman al béisbol.
Por cuarta vez en la historia, y primera desde que Boston ganó los últimos cuatro juegos de la Serie de Campeonato de la L.A. en el 2004, los Medias Rojas y los Yankees volverán a verse las caras en la postemporada. Esta vez será en la Serie Divisional del Joven Circuito, con un equipo que viene de ganar 108 juegos, y el otro 100. Así que las dos novenas no sólo traen toda su historia, sino ese saco de triunfos.
No hubo drama alguno en Fenway Park el pasado fin de semana cuando los dos equipos se vieron las caras, a pesar de que teníamos todo el verano esperando esa serie. Los Medias Rojas ya habían ganado la División Este.
Aunque antes dos clubes de la misma división no podían chocar en esta etapa, ahora sí pueden.
Boston y Nueva York ya han jugado 19 veces esta temporada. Los Medias Rojas se llevaron 10 y los Yankees nueve. Ahora es volver a empezar desde cero. Este fin de semana es diferente. Esta vez, el que pierda se va a casa.
La rivalidad nos trae recuerdos de 1999, cuando el único juego que los Medias Rojas le ganaron a los Yankees fue el Juego 3 en Fenway, cuando el dominicano Pedro Martínez se creció ante Roger Clemens y los Patirrojos ganaron 13-1.
Cuatro años más tarde fue Aaron Boone –¿qué fue de su vida?-ganando el Juego 7 de la Serie de Campeonato en la baja del 11mo con aquel jonrón por el jardín izquierdo, horas después de que el manager de los Medias Rojas, Grady Little, dejara a Pedro demasiado tiempo y justo luego de que el panameño Mariano Rivera tirara los últimos tres innings para los Yankees y jurara luego que estaba listo para lanzar otro más.
Luego vinieron las cuatro noches de octubre del 2004, después de que los Yankees estuvieran a sólo tres outs de barrer en el Juego 4. Pero los Medias Rojas ganaron en extrainnings ese juego y el siguiente, y luego Curt Schilling lanzó el duelo de su vida en el Juego 6, el de la famosa media ensangrentada. En el Juego 7, le tocó a Johnny Damon sentenciar la serie en el viejo Yankee Stadium con un grand slam.
Ahora estarán cara a cara otra vez. Y después de lo que demostraron los Yankees el miércoles ante los Atléticos, con un equipo que Boone ha dicho es el mejor que ha tenido en todo el año, la serie luce muy pareja a pesar de que Boston haya ganado ocho juegos más en la temporada regular para escaparse con la división. Quizás ustedes pueden ver un favorito. Yo no lo veo.
Por muchos años, pareció como si ya habíamos visto lo mejor que nos podían ofrecer estos rivales, especialmente por lo fantásticas que fueron aquellas dos series a siete juegos. Pero aquí estamos, otra vez, y las expectativas están nuevamente por los cielos.
«Yo estaba emocionado desde que sonó el himno nacional», dijo Aaron Judge sobre el duelo ante Oakland.
Ahora imaginen lo que será la noche del viernes en Fenway. Para él y para todo el mundo.
2018-10-05 16:02:44