Santiago de Chile, 9 oct (PL) El amor por las carreras de autos, la defensa de la electromovilidad y el odio ante un eventual despelote del tráfico, adornan el anuncio de una segunda prueba de Fórmula-E en esta capital en enero de 2019.
En un comunicado de prensa, la ministra de Energía de Chile, Susana Jiménez, destacó la realización de la competencia de Fórmula-E por promover el uso de fuentes alternativas amigables con el medio ambiente.
Es una iniciativa que está alineada con lo que queremos hacer como Gobierno, que es promover la electromovilidad, recalcó Jiménez.
La carrera está programada para el 26 de enero, una semana antes que la anterior en febrero del año en curso y promete nuevamente cambiar la fisonomía de Santiago de Chile, una urbe de más de siete millones de habitantes.
En sentido general la curiosidad puede más que cierto escozor que provoca a los vecinos de esta capital molestos por la instalación de infraestructuras y reordenamiento del tránsito por el evento del sábado.
El alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, en principio opositor a la Fórmula-E, prometió medidas especiales para evitar contratiempos a los vecinos durante el montaje de la pista y la preparación de los autos de competencia.
Como se trata de época de pleno verano austral y temporada de vacaciones, el burgomaestre Alessandri prometió que los trabajos se realizarán de día, con todos los accesos abiertos, las piscinas y zonas recreativas funcionando.
La carrera como tal apenas rondará la hora de duración, pero requiere de una logística especialmente minuciosa. A velocidades que pueden alcanzar los 225 kilómetros por hora, los autos eléctricos no resisten toda la prueba.
En el campeonato de monoplazas impulsados por motores eléctricos cada equipo requiere de cuatro vehículos, porque las baterías son alimentadas con un generador que se nutre de glicerina derivada de biocombustibles.
El evento de febrero último contó con la participación de pilotos de Francia, Portugal, Italia, Brasil, Argentina, Reino Unido, Bélgica, Suecia, Australia y Suiza, con 35 vueltas y 12 curvas en un circuito de 2,47 kilómetros.
A diferencia de la anterior, la carrera se efectuará esta vez dentro de un circuito en el interior del Parque O’Higgins, en el centro de la capital chilena.
2018-10-09 14:31:56