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El discurso de Eduardo Estrella en el Club Sameji de Santiago; este domingo proclamó el inicio de la campaña de la Cuarta Vía

El discurso de Eduardo Estrella en el Club Sameji de Santiago; este domingo proclamó el inicio de la campaña de la Cuarta Vía

Dominicanas y dominicanos,

Hoy, lleno de júbilo me dirijo a la Nación, para informarle que nuestra propuesta política ha sido acogida por las organizaciones: Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), presidido por el Lic. Hatuey Decamps; el Partido Humanista Dominicano (PHD), encabezado por su presidente Elexido Paula y el Partido Nacional de Veteranos y Civiles dirigido por su presidente el Lic. Juan Cohen, así como el Frente Nacional Organizado (FRENO), encabezado por Fervio Rodríguez, junto a nuestro movimiento Dominicanos por el Cambio.

Frente al incumplimiento de las leyes por parte de las autoridades, la falta de transparencia en el manejo de los asuntos públicos, la creciente corrupción en todos los ámbitos y el abandono de los reclamos del pueblo, no es posible cruzarnos de brazos. 

Mirar a un lado no es una opción aceptable, callar no sería decoroso y participar en esas prácticas, resulta para nosotros imposible,  deshonesto e indigno.

Los partidos y movimientos integrantes de esta Cuarta Vía asumen el reto de encaminar a la República Dominicana por la vía del cambio bajo una agenda democrática, nacional y solidaria. La Cuarta Vía es una autopista segura, los otros caminos están cerrados.

Nos proponemos devolverle al pueblo dominicano la fe y la esperanza, de que éste país es para todos y no una finca para beneficio y usufructo personal de los que hoy están y muchos de los que ayer estuvieron en el poder.

Apena mucho ver al gobernante candidato, querer justificar la legalidad de los dos préstamos de la Sun Land, sin haber pasado por el Congreso Nacional y sobre el primero de 130 millones de dólares, justificar el pago de 800 millones de pesos por concepto de intereses, finanzas y seguros, y por el segundo de 200 millones de dólares, tener el tupé de decir que no se ejecutó, no porque el gobierno no quería endeudarse, sino porque la empresa no tenía los fondos para desembolsar. 

Queda demostrado que este gobierno se comporta como los “tramposos” que hacen sus negocios a escondidas, para que la población no se entere del uso que darán al dinero tomado prestado y para que no se ponga en evidencia como hipotecan al país.

Ya esta bueno, los dominicanos estamos hartos, no hay cuartos en la calle, definitivamente este gobierno no sirve.

El problema del país no es de ingresos, sino de la mala distribución del gasto. El gobierno en los primeros seis meses de este año recaudo más de once mil millones de pesos fuera de lo programado, pero de la misma manera en ese periodo aumentaron los gastos corrientes del gobierno en un doce por ciento, o sea, se chuparon los mismos once mil millones de pesos que nos quitaron.

Cada día nos estrangulan más los bolsillos con la voracidad fiscal, para con esos cuartos mal gastarlos en altos sueldos, viajes, comidas gourmet en restaurantes, es decir, que los altos funcionarios de este gobierno se han aprendido y han practicado muy bien refrán que dice: a lo que nada nos cuesta, hagámosle fiesta.

Es oportuno que el pueblo dominicano sepa, que hoy que el precio del barril de petróleo va camino a los 100 dólares, que en el articulo primero, párrafo IV de la ley de hidrocarburos, se creo un fondo especial cuyo objetivo era fomentar proyectos de energía alternativa y elaborar programas de ahorro de energía, y por ese concepto ya el gobierno ha recibido alrededor de cuatro mil millones de pesos correspondientes al cinco por ciento de los ingresos percibidos en dicha ley. Lo preocupante es que no se le ha dicho al país en que se ha utilizado ese dinero y ni se ha ejecutado ninguna medida importante que puedan hoy exhibir o valorar, tendente al ahorro  y  a la creación de fuentes alternativas de energía.

Este es un presidente  que definitivamente nos tiene acostumbrados a lavarse las manos en vez de arremangarse la camisa.

El principal problema que hoy enfrenta la democracia en nuestro país, se debe a que el partidismo tradicional se ha deteriorado a niveles tales, que ha perdido la credibilidad  y la legitimidad de los diversos sectores de la vida nacional.

Los partidos políticos tradicionales han renunciado a los principios y postulados que les dieron origen, y se han puesto de espaldas a los sanos y sagrados intereses nacionales.

Lo que existe es una trágica componenda, un acuerdo de impunidades reciprocas, en la cual se perdonan una y otra vez las inconductas y los desmanes ejercidos desde el poder, frente a la mirada de un pueblo que cada vez esta mas indignado del sistema imperante en el país.

Hay candidatos presidenciales que están muy ocupados tratando de convencer a la población sobre cuál es menos malo; cuál aumentó más los sueldos a los altos funcionarios; cuál ha violado más la constitución, cuál ha generado más pobreza y desempleo; cuál es más culpable de la quiebra de las zonas francas; cuál es más corrupto, ellos se disputan quien ha aumentado mas los gastos corrientes y ellos se pelean por tener la supremacía en endeudar al país.

A los Santiagueros no se les puede subestimar, una cosa es vivir y sentir por Santiago y otra es hacer visitas esporádicas en campaña política. Una cosa es haberse ocupado de Santiago como funcionario publico y otra es venir a ofrecer obras cuando se avecina el torneo electoral. En estos casos nosotros los santigueros decimos: “ya es tarde para ablandar habichuelas”.

Con mucho tino, nuestro pueblo llano, al referirse a algo o alguien que no sirve dice: “Ese vale menos que una guayaba podrida”.

He aquí dos guayabas, una que dice E’ pa’ lante que vamos y la otra PPH. Ninguna de las dos sirve para nada, por que las dos están podridas.

Ahora cabe preguntarse  ¿Merece este pueblo que estas guayabas podridas sigan dirigiendo el país? NO

Ya veo que nos estamos entendiendo.

El país esta cansado de uno y del otro, por que los dos, son mas de lo mismo.

¡Republica Dominicana despierta y lanza al zafacón de la historia a quienes te han maltratado tanto y se han burlado de tus sufrimientos!

Aun así, vemos  al candidato gobernante, quien ha gastado millones de pesos a través de una campaña publicitaria promocionando el gobierno y su candidatura, la cual va enfocada en una palabra: PA’ LANTE.

Permítame decirle, que con lo del Pa’lante estoy muy de acuerdo con usted, cosa rara…. explico el por que:

Pa’ lante… va el desempleo.

Pa’ lante…. van los asaltos, los robos a mano armada, los secuestros, y tantas  muertes que vemos a diario producto de la delincuencia.

Pa’ lante… va la falta de medicina en los hospitales, y la desatención a la salud de los pobres.

Pa’ lante… van los precios de la comida, de la gasolina, del gas, de todo lo que necesita el ser humano para sobrevivir,

Pa’ lante… va el endeudamiento publico interno y externo,

Pa’ lante…. van los altos impuestos que pagamos todos los dominicanos,

Pa’ lante… van los escándalos de corrupción.

Lamentablemente si, pa’ lante va la miseria del pueblo dominicano, si permitimos que se queden los que están y pero igualmente, que Dios nos agarre confesao si vuelven los que estaban.

Los dominicanos enfrentamos un gran peligro, el peligro de que todo siga igual o  peor: el mismo desempleo, la misma delincuencia, la misma corrupción.

El peligro de volver a caer en la trampa, de esos, que solo quieren quedarse o volver, los que se creen los dueños de la patria, y que solo esperan su turno para devorar la economía, la seguridad y el futuro del país.

Para luego venir a pretender comprar nuestras conciencias con su dinero mal habido.

Hagamos el cambio: con fe, con firmeza. Que sepan ellos, que los dominicanos no estamos en venta.

Asumimos la firme responsabilidad de desarrollar las condiciones propicias, a través de un modelo de desarrollo nacional, en el que prime la seguridad jurídica, para que el sector empresarial nacional, los inversionistas extranjeros y los trabajadores puedan desarrollar sus actividades y producir riquezas, dentro del marco legal vigente y con apego a los procedimientos democráticos.

Declararemos una lucha sin cuartel, contra la corrupción, el crimen organizado y la impunidad que están destruyendo la nación. No me cansare de repetir que con el triunfo de la Cuarta Vía se iniciará la revolución moral en la Republica Dominicana.  

Reestructuraremos el sector público en un verdadero aparato, en el que prime la eficiencia y el mérito, la sobriedad en el gasto público y el propósito de dedicar los recursos de acuerdo a las prioridades que requieren las exigencias de: salud, educación, empleo, vivienda, transporte, avance tecnológico, seguridad pública, apoyo a la producción y protección del medio ambiente, dándole la prioridad requerida a la producción agropecuaria; ente fundamental para el equilibrio social y la alimentación de la población.

Acabaremos con el saqueo impositivo de los últimos gobiernos, ya que las personas que trabajan arduamente y actúan según las reglas, están cansadas de pagar mayores impuestos y recibir poco a cambio.

Ustedes dirán, que muchas de estas cosas los otros candidatos la incluyen en sus propuestas, y yo les digo, fíjense bien de donde provienen esas ofertas. ¿ Podemos creerle al candidato del PPH, donde su gobierno provoco más de un millón y medio de nuevos pobres en la Republica Dominicana  y llevo el peso casi al 60 por 1 con relacion al dolar?. Y todavía tienen la cachaza de decir, que si saben como hacerlo.

¿Podemos creerle al que encabeza la actual administración en la que se han perdido mas 60,000 empleos de zona franca y mas de 100,000 de la micro, pequeña y mediana empresa?

Ambos son responsables de la situación de calamidad por la que atraviesa la mayoría del pueblo dominicano. Ambos  le han cerrado, a la clase trabajadora y  desempleada, la puerta de la oportunidad en las narices, al darle por las costillas con las ultimas cinco reformas fiscales.

Propongo un país distinto.

 

Aspiro a una nación, donde a esta hora las madres sepan que darán de comer a sus hijos, donde el derecho a ser madre no sea una condena y donde  el gobierno dominicano vaya en auxilio de la madre soltera.

Aspiro, a que en nuestra sociedad en vez de hablar del aborto, se creen estancias infantiles y se proteja la niñez desvalida.

Aspiro a una nación, donde se le paguen salarios justos a los servidores públicos, incluyendo policías y militares.

Aspiro a un país, donde la desigualdad social no se manifieste con tanta crudeza, como en la actualidad, donde un funcionario del gobierno gana más de un millón de pesos, o sea,  300 veces el sueldo de un empleado público y  que terminemos con esta fiesta de unos pocos en contra de la mayoría.

Aspiro a una sociedad, donde los políticos no mientan, no saqueen los fondos públicos, a que tengan sensibilidad social, que dejen a un lado la prepotencia, que no se quieran burlar de la inteligencia del pueblo dominicano y que no se pavoneen exhibiendo tantas riquezas.

Aspiro a proporcionar verdaderas oportunidades a la juventud, quienes son los verdaderos dueños del futuro, a crear las condiciones para que ellos puedan estudiar, casarse, hacer familias e insertarse en el mercado laboral. Aspiro a que ellos se conviertan en los verdaderos protagonistas del renacer de nuestra patria.

Aspiro a un país donde el envejeciente no sea una carga para los hijos y la sociedad, sino que por el contrario sea la fuente de la sabiduría, del consejo, el referente de los valores morales y el garante de la unidad en la familia dominicana.

Aspiro a que en mi país haya un Banco de Reservas,  que no solo preste para comprar jipetas, sino que realice ferias técnicas-agropecuarias donde un pequeño empresario o un productor agropecuario puedan adquirir un equipo a bajas tasa intereses y con entrega inmediata.

Aspiro a que cada día mas la mujer dominicana tenga mayor participación y poder de decisión en los estamentos públicos y privados de la nación.

Aspiro a que se rescate del abandono a la gran masa de desempleados, esos que no pueden esperar más y que hoy deambulan como fantasmas por toda la geografía nacional.

Aspiro a tener una Republica Dominicana, donde no sea una amenaza de muerte  el hecho de salir a las calles, donde podamos ofrecer seguridad ciudadana  y enfrentar, juntos, con firmeza, la delincuencia, porque de no hacerlo, los presos seremos todos nosotros.

Aspiro a una sociedad donde no se mueran indefensos seres humanos a causa del dengue y donde no se gasten cientos de millones en decoración de oficinas publicas y en viajes de placer de funcionarios, mientras en los hospitales no hay ni siquiera jeringuilla y algodón para atender a los pacientes. Donde  se les provea de seguridad social a los miles de dominicanos que no poseen un empleo.

Aspiro a una sociedad donde no haya un metro en el que se gaste mas que siete secretarias de Estado juntas, mientras existen niños recibiendo clases debajo de árboles y sentados en un block.

Por otra parte, quiero decirle a todos aquellos que dedicaron sus esfuerzos y maquinaciones a tratar de librarse de nosotros en el actual proceso electoral y que se frotaron las manos contando con mi ausencia en la contienda que se avecina, que sepan que SE LES PELO EL BILLETE.

Aquí me tienen como candidato, tendrán que competir conmigo y que la cara de Eduardo estará en por lo menos tres recuadros de la boleta electoral, brindándole una alternativa seria al país.

Estoy de vuelta en esta contienda, en esta cita con la historia, he regresado acompañado de hombres y mujeres de partidos emergentes y de la sociedad civil, que les caracteriza la coherencia, los principios y la firme determinación de transformar el país.

Estoy de vuelta, aunque se ha dicho hasta la saciedad que no dispongo de dinero para hacer una campaña política, que no cuento con los recursos  para acometer la tarea que me he propuesto. Que orgulloso me siento de que esto sea así, porque demuestra que no me aproveche de las posiciones públicas que he desempeñado, porque no he traficado con influencias, ni he robado. Porque a diferencia de otros no metí las manos, ni como director de INAPA, ni como Secretario de Obras Publicas, ni tampoco como Senador por mi provincia de Santiago.

Que no tengo dinero, eso no me preocupa, porque la mayoría de los que están aquí y del  pueblo dominicano, tampoco tiene dinero.

Que sirva este testimonio de garantía al pueblo dominicano, que conmigo como presidente de la Republica no habrá negocios turbios, ni componendas, ni estructuras mafiosas.

Porque estoy convencido que el pueblo dominicano quiere y está decidido a apoyar una opción que este dispuesta a asumir la responsabilidad. Conmigo se acabará, de una vez y por todas, el  borrón y cuenta nueva.

Yo no aspiro a lograr todo esto sentado desde mi casa, o como decimos a los que nos gusta la pelota, mirando el juego desde los blichers. Estamos ya en el terreno, este es nuestro momento, llego nuestro turno al bate. Daremos un palo de cuatro bases, para que nuestro equipo, que es la cuarta vía gane y junto a  los fanáticos, que es nuestro pueblo, le podamos dar las gracias a Dios, para que a partir del próximo 16 de agosto realicemos los cambios que aspira y se merece nuestra querida y amada Republica Dominicana. 

Muchas gracias y que Dios me los bendiga a todos.

2007-10-30 04:52:47