Director de Red Poder Comunitario realiza encuentro en barrio La Esperanza
La Esperanza, Pantoja.- El director general de Red Poder Comunitario realizó un encuentro en el barrio La Esperanza en Pantoja, buscando llevar oportunidades humanas a los munícipes de esa localidad.
Laddy Cortorreal expresó que estos encuentros buscan llevar orientaciones, y soluciones a problemas que aquejan a estas comunidades. Muchas veces porque sus munícipes no llevan de conocimiento a los funcionarios de los problemas que los aquejan.
“Hemos recibido apoyo gubernamental para llevar aliento a muchas comunidades gracias a los trabajos que realizamos a favor de las poblaciones más empobrecidas en todo el país, y hacemos estos porque creemos que avanzaremos a medida que vayamos entendiendo la importancia de la unión comunitaria como eje fundamental para nuestra convivencia social”, expresó Cortorreal.
La Esperanza es una pequeña comunidad enclavada dentro de Palmerejito, perteneciente a Pantoja, Santo Domingo Oeste. Actualmente con una población aproximada de unos 1,200 habitantes, unas 753 hembras y 503 varones.
La agenda elaborada en este encuentro se irá desarrollando punto a punto hasta lograr objetivos beneficiosos para La Esperanza. Entre los puntos más importante se encuentran: Problemas de salud, situación de las calles, aceras y contenes, problema de la cañada, falta de un dispensario médico y un multiuso.
Atendiendo a los problemas de salud, el director general de Red Poder Comunitario, refirió a Felipe Martínez, con problemas de corazón, circulación y Presión Arterial, a la señora Resucita Bautista con problemas visuales y Hernia, Raymunda Díaz Feliz con problemas en el Corazón, además ayuda para medicamentos tales como Lipitor 20 Mg. y Plavix Clopidogril 75 Mg.. De la misma manera fueron referidos Milagros Macario con problemas en la vista, Juana Díaz de la Cruz con problemas en la vista. Además de otras quejas que se le buscaran soluciones paulatinamente.
El director de Red Poder Comunitario dijo que en los próximos días comenzará a realizar contactos con funcionarios del gobierno en busca de ir llevando soluciones a los problemas planteados en la reunión comunitaria donde se dieron cita casi unas cien personas.
En La Esperanza hay mucho que hacer, entre los problemas planteados podemos citar las calles, las aceras, que se impartan docencia a nivel secundario, tendido eléctrico, problema de la cañada y mejorar el sistema drenal.
LADDY CORTORREAL NOS NARRA UN POCO DE HISTORIA DE LA ESPERANZA
Cuando el Ciclón Georges azotó la República Dominicana, en el año 1998, ya La Esperanza comenzaba a dar sus primeros pasos.
En esos tiempos no muchas personas querían ir a vivir en un pedazo de tierra desprovisto de todos los servicios básicos.
La situación económica de algunas familias que vivían en lugares geográficos en mejores condiciones que esta comunidad, pero que no eran dueño de sus casas y no podían hacer frente a los pagos mensuales de alquiler de casas, dio como origen que muchos tomaran la idea de irse a buscar mejores vidas, aunque la condiciones reales de estas localidades totalmente desabitadas no era asunto para personas que no tuviesen la imperiosa necesidad tanto económica como el deseo mismo de ser dueños de sus casas.
Es estas realidades que han hecho posible, que gran cantidad de dominicanos decidan ir a probar suerte en lugares que solamente sobreviven los que tienen un gran sueño o una gran necesidad de afrontar las situaciones por las que atraviesan.
Doña Rosa Guzmán, posiblemente la primera munícipe en construir una casa en este barrio, nos narras, las vicisitudes en aquellos tiempos para terminar su residencia, la cual a sobrevivido a la clemencia del tiempo, incluyendo las terribles fuerzas del huracán Georges.
Al igual que doña Rosa, otros munícipes pasaron por la misma situación, ya que llegar a tierras inhóspita no era asunto de juego.
Si un miembro de una familia se enfermaba había que rogar a Dios para que amaneciera y así ir en busca de médico.
El tiempo transcurrió y las cosas fueron cambiando, aunque hoy día, falta mucho por lograr, pero es mejores que hace 10 o 11 años.
Árboles silvestres, animales por doquier eran de las casas más vistas a todas horas, según recuerda doña Rosa Guzmán.
Estos pobladores de La Esperanza, al igual que otros que decidieron buscar mejor suerte en localidades sin servicios básicos, hoy pueden decir, que ya las cosas han cambiado mucho, y donde casi todos son propietarios, algo que vale la pena asumir riesgos y desesperanzas para lograr objetivos.
Hace unos 9 años todas las casas en La Esperanza eran de cartón y madera, hoy a pesar de ser una comunidad pobre se notan casas de buen nivel, esto refleja que las cosas han ido cambiando, y estos cambios han hecho posible, que muchos construyan buenas casas para una población de nivel bajo de recursos económicos.
2008-06-02 00:11:58