Morales Troncoso resalta la capacidad de diálogo y concertación Leonel Fernández
Santo Domingo.- El canciller Carlos Morales Troncoso sostuvo que la capacidad de diálogo y concertación que caracterizan el liderazgo del presidente Leonel Fernández fueron esenciales para el logro de los éxitos que cosechó en la conducción de la Vigésima Cumbre del Grupo de Río, celebrada en Santo Domingo el pasado mes de marzo, en la que se puso fin a la crisis entre Colombia, Venezuela y Ecuador.
Morales Troncoso habló en el acto de puesta en circulación del libro “Momentos Estelares de la Cumbre del Grupo de Río en Santo Domingo”, celebrado en el Palacio Nacional con la presencia del presidente Fernández, de la Primera Dama, doña Margarita Cedeño de Fernández, y del director de Información, Prensa y Publicidad de la Presidencia, Rafael Núñez, quien prologó la obra.
“Lo que aconteció en esa cumbre fue una triple coronación, La coronación de dos de los objetivos esenciales del Grupo de Río: el de presentar soluciones propias para los conflictos en la región, y el de impulsar acciones destinadas a mejorar las relaciones interamericanas”, dijo.
Resaltó asimismo la coronación exitosa del año durante el cual la República Dominicana tuvo bajo su responsabilidad el manejo de la secretaría Pro Témpore del Grupo, “y la coronación de nuestra política exterior bajo el liderazgo del presidente Leonel Fernández, el gran protagonista de la cumbre”.
Explicó que el liderazgo sobresaliente tiene sus medidas en dos reglas de oro, “primero es líder quien tiene un destino, un objetivo y una meta, y segundo, quien es capaz de persuadir a otros para que lo sigan, lo acompañen en el camino hacia ese destino, objetivo y meta”.
“El presidente Fernández cabe en ambas dimensiones”, resaltó el canciller Morales Troncoso.
El funcionario dijo que es una feliz iniciativa la de editar un libro en el que se recojan las incidencias de la Vigésima Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del Grupo de Río.
El canciller destaco en su intervención que las conclusiones de esa región son el tipo de material que donde mejor cabe es en los libros de historia.
Indicó asimismo que en la cumbre estaba en juego nada menos que la paz del Continente y la propia efectividad del Grupo de Río como mecanismo de dialogo y de concertación.
“Estaba en juego el sosiego de millones de ecuatorianos, colombianos y venezolanos, que se acostaron a dormir tranquilos el viernes 29 de febrero y despertaron el día primero de marzo con el sobresalto de que sus países podrían declararse en guerra”, agregó.
Recordó que en el camino hacia la Vigésima Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del Grupo de Río las tensiones no hicieron más que subir, y “el diálogo fue mandato a paseo y el escenario en el que se debatía el conflicto surgido de una incursión armadas de Colombia en territorio ecuatoriano, quedó bajo el dominio de una retórica de confrontación”.
Morales Troncoso sostuvo que no fue fácil el consenso ni el logro de los compromisos que desescalaron el conflicto y que pusieron fin a las mutuas hirientes imputaciones entre los actores.
“Fue un camino cuesta arriba, pero fue un final feliz”, destacó finalmente el secretario de Estado de Relaciones Exteriores en medio de prolongados aplausos de los presentes.
2008-06-20 23:05:45