Santo Domingo.—El primer ministro de Haití, Jean Max Bellerive, declaró este jueves, aquí que las donaciones de la comunidad internacional para la reconstrucción de su país, devastado el 12 de enero por un terremoto, van lentas pero de manera segura.
El funcionario fue entrevistado este jueves en el Ministerio de Economia, Planificación y Desarrollo, donde asistió a una reunión de potenciales inversionistas privados dominicanos mediante el Fondo de Oportunidades y Renovación de Haití, que promueve la firma Portland Private Equity, que preside Michael Lee-Chin, en la lista de multimillonarios de Forbes y miembro del consejo directivo de la OEA.
En respuesta a preguntas periodísticas dijo que la preocupación de su gobierno en las distintas
conferencias con potenciales donantes que tuvieron lugar tras el sismo no era cuantificar los aportes sino evitar repetir lo que se hizo en su país en los últimos treinta años.
«Queríamos tener una visión clara de hacia donde íbamos, preparar los proyectos y buscar el financiamiento para ejecutarlos, no lo que querían cada uno de los donantes, y nuestra posición fue aceptada y apoyada por la comunidad internacional», dijo.
Bellerive agregó que ahora en la Comisión para la Reconstrucción de Haití se están presentando los programas y proyectos de ese plan, para cuya ejecución presentaron en la última reunión 1.6 billones de dólares, de los cuales fueron aprobados y gerenciados 904 millones.
«Esto quiere decir que no son promesas sino dinero ubicado para financiar proyectos específicos presentados por el gobierno haitiano en carreteras, agricultura, electricidad, carretera, educación y salud publica. Sabemos quién los va a financiar y, en algunos casos, ya fueron empezados».
Respecto a la situación hoy en su país respecto a las primeras semanas de enero, dijo que del millón de personas sin techo, unas trescientas mil fueron retiradas de las calles, pero las otras 700 mil continúan allí, por lo que todos los días hay que darles comida, agua, de todo, tareas en las que se gasta mucho dinero, pero ahora de manera más clara y segura.
Contrastó que el haber retirado a trescientas mil damnificados de las calles fue una tarea que no había sido ejecutada en ninguna parte del mundo, ni siquiera en los Estados Unidos, donde aún hay personas en carpas por el huracán Katrina.
Recordò en respuesta a periodistas que lo importante para el gobierno haitiano no es el monto de donaciones recibidas de la comunidad internacional, sino que el destino de las mismas beneficie real y efectivamente a su población.
Citó por ejemplo que tanto la Comunidad Europea como República Dominicana prestan su ayuda directa, por lo que no figuran en la lista de donantes al Fondo de Reconstrucción que maneja el Banco Mundial.
«Dominicana aporta mucha ayuda humanitaria, en comida, construye la universidad de Puerto Príncipe y desembolsa el dinero que había prometido y hay proyectos de carrertera financiados por la Unión Europea que tampoco entran en ese fondo, sino que son desembolsados directamente a las compañías que los construyen», aclaró Bellerive.
«Lo que estamos construyendo ahora es un sistema que permite reintegrar todo lo que está hecho en Haití, lo que se puso en el Fondo, lo que se dio directamente al gobierno, que es muy poco, lo que se dio a ONG, que es mucho, y lo que se pagó directamente a compañías privadas, de eso podemos saber más o menos lo que se invirtió en Haití, pero a mí no me interesan los montos, sino cómo vamos a poner coherencia en lo que se está haciendo», agregó.
2010-08-26 20:29:55