Santo Domingo, RD, 22 nov 2010.- Los países miembros de la OEA asumieron en Santo Domingo el compromiso de destinar mayores recursos a la prevención y mitigación de desastres naturales y promover la coordinación internacional y regional para responder de manera eficaz a las situaciones de emergencia.
La «Declaración de Santo Domingo», expedida al final de la II Reunión de Ministros y Altas Autoridades de Desarrollo Sostenible que sesionó durante tres días en la sede de la Cancillería dominicana, establece también el compromiso de fomentar la utilización de energías limpias en los hogares y los sectores tanto público como privado.
Reconocen que para enfrentar los desafíos del desarrollo sostenible se requiere de enfoques integrales que fortalezcan las alianzas publico-privadas en cada uno de los países y a nivel regional, en temas claves como la producción y consumo sostenible y responsabilidad social, abordando de manera equilibrada las dimensiones económica, social y ambiental.
Estuvieron de acuerdo en que para erradicar el hambre y la pobreza, especialmente la pobreza extrema, crear trabajo digno y decente, elevar el nivel de vida de los pueblos, se debe promover un desarrollo económico sostenible, prácticas empresariales de responsabilidad social y ambiental a través de la equidad, la inclusión social y la participación activa de todos los sectores, asegurando la creación y fortalecimiento de las capacidades de la población.
Abogaron por la creación de un sistema multilateral de comercio abierto, transparente y basado en normas y por la necesidad de que todos los pueblos de la región se beneficien del aumento de oportunidades y las mejores en el bienestar que genera el sistema multilateral de comercio.
En la declaración que fue expedita la noche del viernes en el marco de una sesión que encabezó el dominicano Temístocles Montás, Ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, se instó a los Estados miembros de la OEA a colaborar con las organizaciones nacionales, regional e internacionales especializadas en cuestiones de desastres para fortalecer la cooperación en las Américas en las áreas de reducción y de gestión de riesgo de desastres.
Respecto a las energías limpias, la Declaración de Santo Domingo establece «fomentar esfuerzos para desarrollar sistemas de energía más limpios, asequibles, renovables y sostenibles para promover el acceso a la energía y tecnología y prácticas energéticas eficientes en los hogares y en los sectores público y privado».
La delegación de Bolivia lamentó no firmar la declaración final, y tener que tomar una decisión de este tipo en una reunión organizada en Santo Domingo, «en medio de un pueblo que dispensa exquisita hospitalidad».
Entre otros puntos la declaración establece que «promover una nueva cultura sobre desarrollo sostenible basada en la armonía entre lo económico, lo social y lo ambiental, a través de procesos de sensibilización».
Los países miembros también se comprometen a erradicar «la pobreza» como parte «fundamental del desarrollo sostenible dados los vínculos entre la vulnerabilidad, la pobreza, inequidad, degradación ambiental y desastres».
2010-11-22 18:26:58