Zacarias Moussaoui sólo verá la luz del sol una hora al día
WASHINGTON.- Zacarias Moussaoui, condenado a cadena perpetua por encubrir los atentados del 11-S en EU, pasará el resto de sus días en una cárcel de la categoría de seguridad “supermáxima”, donde sólo verá la luz una hora al día.
Conocida oficialmente como las instalaciones de “máxima seguridad administrativa” en el centro penitenciario de Florence, en Colorado, a esta cárcel que ha albergado a algunos de los delincuentes más notorios de EU también se la conoce con el sobrenombre de “el Alcatraz de Colorado”.
Allí van a parar los reclusos considerados más peligrosos, los que hayan cometido los crímenes más abominables o los que presenten un carácter más difícil.
Entre quienes han pasado por allí se encuentran nombres como Timothy McVeigh, el autor de la bomba contra un edificio federal de Oklahoma que mató a más de 160 personas en abril de 1995,ya ejecutado- o Ramzi Yousef, el terrorista que perpetró el primer atentado contra las Torres Gemelas de Nueva York, en 1993.
También se encuentra allí recluido Richard Reid, el conocido como “terrorista del zapato” , de quien -durante su juicio- Moussaoui aseguró que iba a ser su copiloto en otro avión que iba perpetrar atentados similares a los del 11 de septiembre del 2001.
La “superprisión”, uno de los tres centros que forman el complejo penitenciario de Florence, se encuentra en una zona montañosa, totalmente aislada, a unos cerca de 150 kilómetros al sur de Denver, la principal ciudad de Colorado.
Construida en 1994 con un coste de cerca de 60 millones de dólares, desde que entró en funcionamiento no ha dejado de generar controversia.
Las condiciones de vida diaria para los cerca de 400 presos alojados en esta cárcel son las más duras que existen en el sistema penitenciario de EU.
Los reclusos pasan 23 de las 24 horas del día en confinamiento solitario en sus celdas, de 3.5 metros por dos. La hora restante pueden pasarla en un patio de recreo vallado por un espeso muro de cemento.
En las escasas ocasiones en que pueden salir de su celda, lo hacen siempre es con las manos esposadas y escoltados al menos por dos guardias.
El cemento es una constante en la rutina de la prisión. Los pocos muebles de las espartanas celdas están construidos con ese material: una mesa, un taburete y una cama. A quienes demuestren buen comportamiento se les premia con una televisión en blanco y negro, en la que sólo pueden verse programas educativos.
Cada celda cuenta, además, con una ducha que funciona con un temporizador, y un inodoro que se desconecta si se atasca. También está dotada de un sistema de cámaras que permiten vigilar las 24 horas al día del preso.
Dentro del régimen de aislamiento, los reclusos comen en sus celdas, para reducir al mínimo el contacto con sus compañeros.
El régimen habitual permite a los presos cinco visitas al mes, ninguna de las cuales debe durar más de siete horas. En esas visitas no se permite el contacto personal.
Sin embargo, se cree que Moussaoui contará con un régimen aún más estricto, en el que las visitas estarán aún más restringidas.
Lograr la transferencia a otra prisión con un régimen un poco más permisivo puede llevar años de demostración de buena conducta.
El “Alcatraz de Colorado” despierta terror incluso entre los delincuentes más endurecidos.
Al emitir hoy la sentencia, la jueza Leonie Brinkema le dijo a Moussaoui: “ usted vino aquí para ser un mártir, un héroe en medio de la gloria, pero en lugar de eso morirá como un desgraciado”.
Más de un asesino embrutecido le daría la razón. El cabecilla de la banda “Latin Kings”, Luis Felipe,condenado a cadena perpetua en 1997 por asesinato, gritó cuando supo que su destino era Florence: “Me van a matar. Me han condenado a morir un poco cada día”.
2006-05-05 11:07:58