Los presidentes Néstor Kirchner, Evo Morales, Lula da Silva y Hugo Chávez niegan que exista una crisis regional
BUENOS AIRES, Argentina.- Los presidentes Néstor Kirchner (Argentina), Evo Morales (Bolivia), Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil) y Hugo Chávez (Venezuela) negaron el jueves que exista una crisis regional y ratificaron su compromiso con la integración sudamericana.
El mensaje de los mandatarios se produjo luego de que los cuatro sostuvieron una tensa reunión de más de cuatro horas en la norteña ciudad argentina de Puerto Iguazú para evaluar el impacto de la polémica nacionalización de hidrocarburos decretada por Morales.
En un comunicado conjunto que fue leído por Kirchner al término de la cita, los cuatro países descartaron que la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia, decretada el pasado lunes, tenga resultados negativos en Sudamérica.
Además señalaron que Bolivia quedó formalmente invitado a participar en el ambicioso proyecto energético del gasoducto del sur, que contempla una inversión por 23 mil millones de dólares y el cual acordaron el año pasado Argentina, Brasil y Venezuela.
La improvisada reunión fue citada con carácter de urgente luego que funcionarios de Argentina y Brasil criticaran a Morales por omitir avisarles de su histórica nacionalización y por poner en peligro su abastecimiento del estratégico gas boliviano.
En el comunicado, los presidentes dejaron en claro su compromiso de profundizar el fortalecimiento del Mercado Común del Sur (Mercosur) , pese a que en la cita estuvieron ausentes los mandatarios de Paraguay y Uruguay, los otros dos miembros del bloque.
De acuerdo con analistas sudamericanos, la nacionalización de los hidrocarburos decretada por Morales podría provocar una inédita crisis regional que pondría en jaque el proyecto de integración energética y tensionar las relaciones entre los países del área.
La decisión puso en entredicho los procesos regionales de integración política y energética, así como el liderazgo que había ejercido en Sudamérica el mandatario brasileño, indicaron los especialistas.
Bolivia abastece a Brasil de 26 millones de metros cúbicos diarios de gas natural, cifra equivalente más de la mitad del total que consume de combustible esa nación, la cual, a través de Petrobras, tiene millonarias inversiones en territorio boliviano.
En Bolivia también opera la empresa hispano-argentina Repsol-YPF, la cual ocupa el segundo lugar en importancia en el sector energético del país altiplánico, luego de Petrobras, y que además abastece de gas natural a Argentina.
Kirchner señaló al término de la reunión de este jueves que durante la cita quedó garantizado el abastecimiento de gas boliviano, lo cual impacta principalmente a Brasil.
Los mandatarios de Argentina, Brasil y Venezuela se comprometieron además a fomentar inversiones conjuntas para favorecer el desarrollo integral de la empobrecida Bolivia.
En el intercambio de preguntas y respuestas que tuvo lugar en una rueda de prensa tras la cita, Kirchner aseguró que la decisión soberana de Bolivia fue absolutamente respetada por el resto de los países participantes de la cumbre.
Morales, por su parte, explicó que este es un momento histórico para cambiar la situación económica y social de Bolivia, y consideró que estos acuerdos fortalecerán a su pueblo.
“El diálogo es importantísimo y con esta reunión se resuelve cualquier susceptibilidad de los gobiernos de estos países”, afirmó.
Por su parte, Lula dejó en claro que Brasil reconoce el derecho de Bolivia de defender la soberanía de sus riquezas minerales, más allá de que Petrobras, empresa estatal brasileña, tiene amplios intereses en yacimientos de hidrocarburos bolivianos.
“Los precios (del gas que vende Bolivia a sus vecinos, uno de los puntos de conflicto) se discutirán de la manera más democrática posible, se respetan los derechos de Bolivia porque respetamos el pensamiento sobre la integración sudamericana ” , afirmó Lula.
El mandatario brasileño enfatizó que América del Sur debe presentarse ante el mundo con la capacidad de lograr un buen entendimiento a pesar de los conflictos.
“No queremos continuar siendo un continente pobre. Brasil conoce la situación de Bolivia y desde el primer día me puse a disposición para discutir de qué forma podemos trabajar para elaborar proyectos que puedan ayudar al desarrollo de Bolivia”, dijo.
Además advirtió que Petrobras continuará invirtiendo en los países en donde haya posibilidades, con lo cual dejó abierta la puerta a las versiones que circularon en el sentido de que la empresa dejaría de invertir en Bolivia luego de la nacionalización.
Lula confió en que se construirá una alianza continental para que Sudamérica se presente unida y fuerte en todos los foros multilaterales.
Muchas veces, explicó, “lo que parece conflicto es resultado de la consolidación de los procesos democráticos de nuestros continentes, mucho tiempo fuimos dependiente de Estados Unidos y la Unión Europea. Ahora somos adultos”.
Chávez, por su parte, sostuvo por encima de cualquier dificultad, lo importante es que se respetó la decisión soberana de Bolivia y se le incorporó al megaproyecto estratégico del gasoducto del sur.
Sonriente, el mandatario venezolano afirmó que esta mini-cumbre de última hora fue “un golpe a mentón de quienes apuestan por nuestra división”.
2006-05-05 11:14:32