Sigue bajando el petróleo de Texas
NUEVA YORK.- El precio del crudo de Texas se situó por debajo de 57 dólares en Nueva York a pesar de la decisión de la OPEP de recortar en 1,2 millones de barriles su nivel actual de producción.
En la Bolsa Mercantil de Nueva York (NYMEX), los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI), los de referencia en EEUU, para entrega en noviembre se negociaban a 56,95 dólares/barril (159 litros), después de restar 1,55 dólares al precio anterior.
Los contratos de petróleo WTI para entrega mas próxima no han cerrado con un precio inferior a 57 dólares desde el 29 de noviembre, cuando terminaron a 56,50 dólares/barril.
Los contratos de crudo para noviembre expiran y aquellos que tienen prevista su entrega en diciembre, que se tomarán como referencia desde el lunes, bajaban 1,05 dólares, para situarse a 59,45 dólares por barril.
Los precios de los combustibles también se inclinaban a la baja con excepción del gas natural, que presentaba una moderada tendencia al alza.
Los contratos de gasolina para entrega en noviembre rebajaban en alrededor de un centavo su precio anterior y se negociaban a 1,4730 dólares (galón (3,78 litros).
El valor del gasóleo de calefacción para ese mismo mes retrocedía unos 4 centavos y se situaba en 1,6793 dólares/galón.
Los contratos de gas natural para noviembre, por el contrario, añadían unos 12 centavos al precio anterior y se negociaban a 7,25 dólares por mil pies cúbicos.
Los expertos resaltaron que los mercados se mostraban un tanto escépticos en cuanto a la disciplina de los socios de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para aplicar el recorte pactado el jueves en Qatar, que superó en 200.000 barriles a lo que se preveía.
Crudo de la OPEP
La primera rebaja de la oferta de crudo de la OPEP desde 2004, pactada esta madrugada en Doha, se traduce en una defensa de 60 dólares como precio mínimo para el barril de Brent o WTI por parte del grupo, que con el acuerdo de hoy reafirma su determinación a recuperar el perdido control sobre los precios.
Oficialmente, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no ha adoptado de momento el nivel que aspira defender para el valor del «oro negro».
Pero la clave es el momento en el que se pactó la reducción del bombeo, cuando las cotizaciones mostraban una clara tendencia a instalarse por debajo de la frontera de los 60 dólares en los mercados de Londres y Nueva York, tras un descenso de más de un 25 por ciento desde los valores récord, superiores a los 78 dólares.
Con un recorte de sus suministros en 1,2 millones de barriles diarios (mbd), superior a la anticipada rebaja de 1 mbd, y la advertencia de que está lista para pactar una segunda reducción en la próxima reunión, el 14 de diciembre en Abuya, la OPEP envió esta madrugada el mensaje esperado en los mercados.
La medida «provisional», que deja en suspenso las cuotas vigentes y sitúa el bombeo conjunto de los diez países sujetos a ellas -todos menos Irak- en 26,3 mbd, demuestra que el grupo ha vuelta a la estrategia de retirar barriles para apuntalar el valor del crudo.
Sin embargo, no sólo queda por ver qué grado de cumplimiento del compromiso muestran los países miembros en las próximas semanas, sino también qué efecto tiene en los mercados el repentino aumento de la capacidad ociosa del grupo.
De hecho, tras subir fuertemente ayer, los precios bajaban esta tarde en los mercados de futuros de Londres y Nueva York.
El barril de Brent, el crudo de referencia para Europa, se situaba en 60,09 dólares a las 15.19 GMT en el londinense Intercontinental Exchange Futures (ICE), perdiendo 80 centavos de los 1,29 dólares que ganó con el valor del cierre de ayer.
También retrocedía el precio del Petróleo Intermedio de Texas (WTI), referente en Estados Unidos, hasta los 57,67 dólares por barril a las 15.59 GMT en la Bolsa Mercantil de Nueva York (NYMEX), donde terminó a 58,50 dólares/dólares.
Resulta que el aumento de la oferta de crudo hasta alcanzar el límite máximo de la capacidad del bombeo se había convertido últimamente en un importante factor alcista, porque dejaba sin capacidad excedentaria a la OPEP para responder a cortes imprevistos de suministros, fortaleciendo los temores a una escasez.
Ahora, esa capacidad ociosa aumenta de golpe en 1,7 mbd, la diferencia entre el nuevo nivel de bombeo y los 28 mbd de la cuota, colchón de reserva que amortigua los efectos que suelen ejercer los conflictos políticos e incertidumbres climáticas sobre los sensibles precios petroleros.
Por otra parte, la mayor capacidad de producción disponible le devuelve a la OPEP un margen de maniobra importante para poder actuar no sólo cuando los precios bajan, sino también cuando suben, necesario para establecer una franja de fluctuación que permita estabilizar el mercado, uno de los objetivos explícitos del grupo.
Lejos ha quedado la llamada «banda de precios», de entre 22 y 28 dólares, que la organización adoptó en 2000 para estabilizar el barril (de 159 litros) de su petróleo en una media anual de 25 dólares, y que oficialmente declaró caduca a principios de 2005.
Según los productores, la estructura del mercado ha cambiado desde entonces y el precio «justo» es aquel que garantiza los ingresos de los países productores integrando adecuadamente la subida de los costes de producción y garantizando los beneficios de los inversores, sin frenar la demanda de los consumidores.
Es posible que la OPEP necesite aún más recortes de su oferta para defender una base de 60 dólares para el barril de WTI, pero luego dispondrá de suficiente capacidad ociosa para establecer también un techo, lo que permitiría volver a tener una franja de fluctuación que aporte estabilidad a los nerviosos mercados.
2006-10-21 21:01:09