Embajador propone dominicanos corten café en Puerto Rico
San Juan.- Puerto Rico pierde cada año un 30 por ciento de su café por falta de mano de obra para recogerlo, por lo que el embajador adscrito a la cancillería dominicana en San Juan, Julio César Santana, propone elaborar un plan para que recolectores de café de su país puedan trabajar en la vecina isla caribeña.
Santana explicó que un acuerdo a tres bandas entre las secretarías de Trabajo y Agricultura de República Dominicana, los departamentos equivalentes de Puerto Rico y las autoridades de inmigración de EEUU «sería muy beneficioso para las economías de los dos países caribeños».
Este acuerdo también «resolvería el problema que cada año confrontan los productores de café puertorriqueños y evitaría que agricultores dedicados por muchos años a la industria del café tengan que dejar esta actividad».
Sostuvo que según trascendió en recientes vistas de la Cámara de Representantes de Puerto Rico, de los 18.000 empleados que necesita el sector cafetalero cada año en época de cosecha, sólo se consiguen reclutar a entre 10.000 y 13.000.
Santana, quien fue el cónsul dominicano en Puerto Rico entre 1996 y 2000, propuso crear una comisión para estipular todos los aspectos del acuerdo, que estipularían desde el salario que recibirían los empleados temporales dominicanos hasta quien pagaría el viaje, el alojamiento, la manutención y los seguros.
Dijo que muchos alcaldes de los municipios cafetaleros «están dispuestos a correr con parte de los costos porque así se incentiva la economía de esa área» y aseguró que en la República Dominicana existe un exceso de mano de obra entrenada para la recolección que estaría dispuesta a realizar el viaje.
Cuestionó el criterio de las autoridades de inmigración de EEUU que dificulta la importación de mano de obra en lugares donde hay un 30 por ciento de desempleo, como es el caso de muchos pueblos cafetaleros, porque «cuando vas a ver (los desempleados de esos municipios) no quieren recoger café porque han estudiado».
El embajador adscrito defendió que el trabajo en el cafetal «requiere de una actitud, de gente que le guste eso de estar en la loma» y advirtió que a Puerto Rico, gran consumidor de café, le sale más caro importar el café que no puede producir que lo que le costaría importar empleados temporales dominicanos.
2007-01-31 12:38:54
