ACOFAVE reconoce Aduanas por prohibición guía a la derecha
La Asociación de Concesionarios de Fabricantes de Vehículos de Motors (ACOFAVE) expresó su reconocimiento a la Dirección General de Aduanas por la emisión y puesta en vigencia de la Norma General Número 2-08, del 6 de octubre del 2008, que prohíbe la importación de vehículos de motor con volante a la derecha.
La Junta Directiva de ACOFAVE manifestó su gratitud al licenciado Miguel Cocco, Director General de Aduanas, por su actuación como funcionario ejemplar y valiente defensor de los derechos de los consumidores en la República Dominicana.
La junta está compuesta por Fernando Lama (Bonanza Dominicana), Clara Reid (Reid & Cía.), Miguel Barletta (Santo Domingo Motors Co.), María Isabel Bellapart (Agencia Bella), Gilberto Marión-Landais (Euromotors/Técnica), Nelson Peña (Peravia Motors), Avelino Rodríguez (Magna Motors) y Enrique Fernández, Director Ejecutivo.
Al hacer la felicitación a las autoridades de la DGA, ACOFAVE a nombre de las 22 empresas asociadas destacó que no se trata de incrementar el porcentaje de las ventas de las unidades nuevas, sino de proteger a todos los usuarios de este importante medio de transporte y velar por su seguridad.
Se explicó que en la República Dominicana, durante los primeros seis meses del 2008, se importaron 9 mil 927 unidades con el guía a la derecha, de un total de 34 mil 043 de vehículos usados importados en el mismo período, lo que significa un 30% del total de vehículos usados importados.
Se indica que estos vehículos constituyen un peligro para los usuarios de los mismos y para las demás personas que utilizan las vías de comunicación terrestre, incluyendo a los peatones.
ACOFAVE dijo que una vez llegados al país, la mayoría de los vehículos con el guía a la derecha son modificados artesanalmente y convertidos en “travestis”.
Se señala que otra proporción de dichos vehículos transitan por las calles y carreteras sin ninguna modificación, en flagrante violación de la Ley 241 sobre Tránsito.
“A veces la única modificación que se les hace es colocarle a los cristales un laminado bien oscuro, para que desde afuera resulte imposible determinar a dónde está ubicada la persona que los maneja”, expresó. A estos vehículos les resulta prácticamente imposible rebasar a otro pues quien lo conduce no tiene visibilidad clara del tráfico que viene en contra.
Explican que no existe una manera profesional de convertir estos vehículos, ya que todos los fabricantes se oponen a dicha modificación, y que por eso se establece que es una modificación artesanal.
Indican que no existen “kits” de conversión, sino que los mecánicos de patio que las llevan a cabo transfieren los pedales y el guía del lado derecho hacia la izquierda luego de hacer huecos adicionales que debilitan el panel delantero de protección, con gran riesgo para la seguridad del conductor, de los pasajeros y de otros usuarios de las vías públicas.
ACOFAVE precisó que al modificarse el sistema de conducción se pierde precisión pues las piezas han sido adaptadas para trabajar en el lado contrario de su posición original y se corre el riesgo de que el mecanismo que hace que la varilla del guía colapse en caso de colisión deje de funcionar correctamente.
“Todo el sistema de frenos que funciona a base de presión hidráulica se compromete pues al cambiar de posición dichas tuberías las mismas pueden ser objeto de pliegues y escapes que afectan directamente la seguridad de frenado. Igualmente el cableado eléctrico es objeto de tensiones y presiones nuevas o de roturas al ser manipulado y se pueden producir incendios, cortocircuitos o mal funcionamiento”, apuntó.
También explica que las luces delanteras vienen ajustadas de fábrica para iluminar ligeramente hacia la derecha en el caso de vehículos con guía a la izquierda para disminuir la probabilidad de cegar a los conductores que vienen de frente y para iluminar a la calzada o paseo que queda más cerca del vehículo y prevenir accidentes con los peatones.
Se manifiesta que, además, los limpiavidrios que están diseñados para dar prioridad a la visibilidad del conductor y no a la del pasajero, terminan funcionando con un criterio totalmente opuesto a dicho objetivo, dándole la menor claridad de visión al puesto del conductor.
2008-10-07 20:47:28
