Economia

Serrulle ?país requiere plan acorde necesidades?

Santiago.- Frente a la crisis económica que sacude a los pueblos del mundo, hay que elaborar planes y programas, y buscar la integración de cada hombre y de cada mujer, así como de todos los sectores que intervienen en la producción de nuestra nación con el interés de que en mancomunidad podamos elaborar la metodología y el procedimiento del plan concreto en consonancia con las necesidades imperativas que requiere el país, destacó el licenciado Julián Serulle en su alocución semanal por una red de emisoras.

Es por ello que ante lo que puede significar para nuestras naciones esta crisis económica que se previó y que arrastramos desde hace años, se impone que observemos, que en vez de estar hablando que todo marcha bien, reflexionemos en la dirección de si debemos buscar inmediatamente respuestas ajustadas a nuestra realidad.

La crisis económica que sacude al mundo, y no quiero que interpreten que hay un concepto negativo en nosotros, ni tampoco el deseo en llevar malas noticias, por el contrario, lo que buscamos es que se tome conciencia de lo que está ocurriendo en la comunidad internacional, planteó Julián Serulle.

Sentenció que los terremotos que sacudieron las bolsas de valores durante el pasado septiembre negro del año recién terminado, han precipitado el fin de una era del capitalismo, la arquitectura financiera internacional se ha resquebrajado y por tanto, nada volverá a ser como antes.

Por esa razón, ese libre mercado, que tanto habló el presidente Ronald Reagan en los Estados Unidos, que lo habló la primera ministro Margaret Thatcher en Inglaterra, y los familiares, padre e hijo Bush; hoy no puede mantenerse, porque el estado tiene que jugar su papel para imponer las reglas y las condiciones en beneficio de las grandes mayoría de cada estado, explicó Serulle.

Debemos señalar que estudiosos en la materia habían previsto la situación actual, el desplome de Wall Street, desde hacía años, por lo que ese derrumbe financiero es comparable a lo que representó en el ámbito geopolítico, la caída del muro de Berlín como capital de Alemania, que estaba dividida en lo que eran comunistas y supuestos demócratas, pero también hay que decir supuestos comunistas, porque jamás practicaron el comunismo, como los demócratas tampoco practican la democracia en su sentido pleno, ellos dividieron esa ciudad a través de un muro de concreto y las familias no podían intercomunicarse, al caer la Unión Soviética, los alemanes buscaron la unión y hoy es una sola sociedad, argumentó.

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La crisis de las finanzas de hoy es precedida por un reinado de más de treinta años de los fundamentalistas del mercado, aquellos que no creían en mas nada que el mercado libre, abierto, en donde hacían lo que le viniera en ganas, repitieron que éste siempre tenía razón, o sea, que la razón solo estaba de parte del mercado, que la globalización era sinónimo de felicidad, y que el capitalismo financiero edificaba el paraíso terrenal para todos; pero se equivocaron porque el mismo papa Juan Pablo II consideró ese mercado y a ese capitalismo como algo diabólico, como algo oprobioso y ultrajante.

Hoy se puede llegar a la conclusión, tal como lo reconocen especialistas, como bien señala Ignacio Ramonet, del diario francés, el mundo diplomático: la edad de oro de Wall Street se acabó, así como la etapa de la exhuberancia y el despilfarro, representado por una aristocracia de banqueros de inversión, los llamados amos del universo, citó Serulle.

Continuó diciendo que, esto también lo encontramos nosotros en una gran obra que escribió Tom Wolfe conocida con el nombre de la Hoguera de Vanidades, en el año1987: esa elite dueña del mercado, que preconizaba y preconiza la globalización del mercado, del dejar pasar y dejar hacer; estuvo poseída por una lógica de rentabilidad a corto plazo, no le importaba nada, sino lo que podía lograr en el presente, y por la búsqueda de beneficios exorbitantes, el individualismo, el egoísmo.

Estaban dispuesto a todo para sacar ganancias, recurrieron a las ventas abusivas, manipulaciones, invención de instrumentos financieros opacos, titulación de activos, contratos de cobertura de riesgos; es decir, la fiebre del provecho fácil se contagió a todo el planeta, esa vanidad, ese egoísmo, la perdida del concepto, de la solidaridad y de lo humano, desapareció; los mercados se sobrecalentaron alimentados por un exceso de financiación que facilitó el alzas de los precios, más de 250 mil millones de dólares se han esfumado, agregó Julián Serulle.

La República Dominicana es un país rentista, pues aquí se vende una finca, se vende ganado, para colocar el dinero de esas operaciones comerciales en los bancos, buscando intereses, pero no olvidemos que los bancos cobran alta taza de intereses, mientras pagan pírricos beneficios a los depositantes, no olviden que, hay mas de 70 mil millones de pesos que pertenecen a los empresarios y a los trabajadores en los planes de pensiones; millones que son aprovechados por esos bancos.

El naufragio no puede sorprender a nadie, el escándalo de las hipotecas basura era por todos conocido, no podía ignorarlo ningún gobierno en el mundo por tener acceso a los informes al instante, al momento; por qué, se preguntaran ustedes, y la respuesta es que ese crimen beneficiaba a muchos y, se siguió afirmando que la empresa privada y el mercado lo arreglaban todo, llegando al extremo que en nuestro país, vendimos y privatizamos, en gran medida, el patrimonio del pueblo dominicano, afirmó Serulle.

Se confirma una ley del cinismo neoliberal, de ese neoliberalismo que todos los gobiernos que hemos tenido del 1966 para acá se han vanagloriado; se hace pagar a los pobres las excentricidades irracionales de los banqueros y, se los amenaza en caso de que se nieguen a pagar con empobrecerlos incluso más, las rentas altas, las cargas impositivas, los gravámenes.

Por ejemplo, el gobierno del presidente Bush se negó a firmar una ley que ofrecía una cobertura médica a nueve millones de niños pobres por un costo de aproximadamente cuatro mil millones de dólares, por considerar eso un gasto inútil, mientras gastaba millones y millones en la guerra de Irak y Afganistán.

Ahora, para salvar a los señores de Wall Street, nada le pareció suficiente; llega ahora el decir: hay un socialismo para los ricos y el capitalismo salvaje para los pobres, un estado siendo solidario con los ricos y negándole el derecho a los pobres; pero eso lo encontramos en todas parte del mundo, y surge la pregunta, cuánto durará la crisis?

Hay quienes contestan, veinte años, si tenemos suerte, o menos de diez, si las autoridades actúan con manos firmes, ese fue el vaticinio de un editorialista de uno de los grandes periódico de los Estados Unidos, y cuando hablamos de la crisis y traemos esto a colación para que busquemos, cómo nosotros autorretratarnos, enfatizó Serulle.

Permítanme decirles, porque esto hay que repetirlo muchas veces, porque vienen discursos bonitos, como si nosotros fuéramos un país desarrollado y que pudiéramos actuar por si mismo, por nuestra cuenta, cuando somos dependencia de los Estados Unidos y como marche ese país, como marche su economía, así mismo van a llegar boronas donde nosotros, así va ha ser la vida y por eso es importante que lo sepamos para que no nos vengan a impresionar con peroratas de nadie, advirtió Julián Serulle.

Este huracán económico se ha llevado por delante una cuarta parte de la riqueza mundial, y quisiera saber quien se atreve en el país a negar eso, este fenómeno está provocando en casi todo el planeta el cierre de fábricas; sólo hay que ver aquí, como han cerrado la mayoría de las fábricas de zonas francas, las empresas nacionales están pasando por un momento difícil, expuso Serulle.

La micro, la mediana empresa, la explosión del desempleo, quien puede negar que ha aumentado el desempleo en la República Dominicana; quiero que sepan que una escalada proteccionista y la radicalización de las protestas sociales se está expresando en la mayoría de los países; todo esto es causa de pobreza, de angustia y de exclusión, la lepra del desempleo se extiende por todas parte.

Hasta el mes de enero en Estados Unidos la recesión ha destruido tres millones 600 mil puestos de trabajo a un ritmo nunca visto, la mitad durante los últimos tres meses, el total de personas paradas ya asciende a once millones 600 mil trabajadores y trabajadoras, y se espera sigan lanzando a hombres y mujeres a formar parte del ejército de desempleados, también en una economía como la de China, la caída de las exportaciones provoca el hundimiento de la producción fabril y despidos masivos, no son inventos.

Se impone pues, que nos dediquemos a trabajar verdaderamente y de forma imperativa e inmediata con planes concretos por las reales prioridades que requiere la patria dominicana, debemos conocer lo que está pasando en el mundo para buscar respuesta a lo interno de nuestro país ajustado a nuestra propia realidad, concluyó Julián Serulle.

2009-03-17 18:49:46