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Por Oscar López Reyes
¡Esas sí son ruedas de prensa!
Asiduamente, altos funcionarios del gobierno y empresarios convocan a una «rueda de prensa», en la cual leen documentos corregidos por abogados ?especialistas en quitarles la sustancia noticiosa por infundados temores a demandas judiciales o porque se inventan cualquier cosa para justificar sus honorarios-, y cuando terminan se retiran raudos del pódium. Dejan a los periodistas con las palabras en la boca…
Más que una «rueda de prensa», vamos a bautizarla como una «encerrona mediática» o un «gargajeo mediático», porque deslinda como un monólogo que enmudece a los redactores. No viabiliza el feed-back o la interactividad expositor-entrevistador, y es un germen que da pábulos a rumores, en virtud de que la disertación unilateral -los voceros dicen lo que creen le conviene-, siembra dudas, por la curiosa ausencia de datos.
La rueda de prensa de veraz permite formular preguntas al portavoz, que las responde sin tapujos. Etimológicamente, rueda proviene de la locución latina rota, que estipula diálogo. Así fue concebida desde que en 1913 el presidente de Estados Unidos Thomas Woodrow Wilson intercambiaba, permanentemente, con los reporteros que cubrían la Casa Blanca, que se acomodaban en un redondel o círculo.
El coloquio de máximos representantes de instituciones oficiales, corporaciones empresariales, partidos, gremios, grupos barriales y otros colectivos con profesionales urgidos de informaciones para suministrarlas a la sociedad, se torna cada vez más frecuente. Unos se exceden en locuacidad, como el presidente de México Andrés Manuel López Obrador, quien todos los días a las 7 de la mañana conversa con miembros de la prensa, lo que satura y despoja de cierta solemnidad al jefe de Estado. Y, en contraposición, otros hacen mutis, como el presidente Danilo Medina, quien ha sido criticado por esa estrategia de gobernanza.
Los corros no convencionales radiotelevisivos del Ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas ?ex comentarista de CERTV o Radio Televisión Dominicana- sobre el coronavirus son necesarias y urgentes, y encarrilan como verdaderas ruedas de prensa, por su ideal retroalimentación. Son memorables también por la virtualidad primaria en el país, por su frecuencia: diarias, y su alcance: altísima audiencia.
Para que las ruedas de prensa cotidianas de Sánchez Cárdenas sean más dinámicas y provechosas para la colectividad, se impone que las preguntas sean breves y mejor elaboradas, que cada colega haga una sola y sea identificado su centro laboral. Así más medios tendrán participación y el Ministro de Salud Pública contestará con más precisión, y no quedará enredado en una lluvia de interrogantes de un informador público.
Oscar Lopez Reyes,
Ex presidente Colegio de Periodistas.
28 de marzo del 2020.
Cordialmente,
Oscar López Reyes
Periodista-mercadólogo, escritor y artículista de El Nacional,
Director Escuela de Comunicación Universidad O&M,
Ex Presidente del Colegio Dominicano de Periodistas
2020-03-28 12:35:51
