Bogotá, 21 abr (PL) El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, reiteró hoy su decisión de proseguir los esfuerzos pacificadores mediante el diálogo con la insurgencia como vía para finalizar el prolongado conflicto armado.
Yo escojo la paz como puerto de destino y asumo, como he asumido, los inmensos riesgos de buscarla, insistió el mandatario.
Unos 50 años de guerra y más de 200 mil muertos deberían ser suficiente saldo trágico para convencernos de que seguirá derramándose más sangre si no negociamos el fin de esta conflagración, enfatizó el jefe de Estado en repuesta a pronunciamientos de ciertos sectores contrarios a las pláticas con las guerrilleras FARC-EP.
Santos admitió que conversar entre adversarios no resulta sencillo, pero agregó que los conflictos por duros y crueles que sean terminan siempre en una mesa de concertación.
Durante la inauguración del Consejo Nacional de Paz en esta ciudad, el jefe de Estado lamentó la muerte de 11 efectivos del ejército la semana previa durante un enfrentamiento con integrantes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP).
Tal suceso fue calificado por el ocupante de la Casa de Nariño de un acto deliberado mientras voceros de la agrupación insurgente aseguraron que se trató de un episodio derivado del asedio militar contra sus tropas pese a la tregua bélica decretada desde el pasado 20 de diciembre por ese movimiento.
A raíz de esos acontecimientos el gobernante decidió reanudar los bombardeos contra las FARC-EP, suspendidos desde hacía más de un mes, no así las ofensivas terrestres.
Ante tal coyuntura los detractores de los diálogos y otros actores del escenario nacional exigieron «mano dura» o un reforzamiento de la ofensiva contra esa agrupación, involucrada en la confrontación.
¿Les han preguntado a quienes están en medio de las balas si resisten más guerra?, ¿Les han preguntado a los campesinos y a las miles de familias que han puesto y siguen poniendo los muertos si es eso lo que quieren?, enfatizó Santos en el discurso de apertura de la reunión.
Equipos gubernamentales y de las FARC-EP platican en La Habana desde 2012 para hallar una salida negociada a la guerra interna.
Pese a los recientes hechos y a las diversas posturas en torno a las circunstancias que los rodearon, ambas delegaciones ratificaron la víspera su decisión de proseguir los ciclos de encuentros para llegar a un acuerdo que ponga final a la conflagración, única del continente.
2015-04-21 14:19:34
