Efemerides, Portada

Gobierno liberal del Cibao con una decisión abrió a Pedro Santana la vía de retomar el poder

Pedro Santana

Por Héctor Tineo Nolasco

Diariodominicano.com

MONTECRISTI,  el 25 de agosto de 1857, en virtud de una  disposición del Gobierno Provisional de Santiago, que le levantó el impedimento de entrada a los exiliados políticos, retornó a República Dominicana, por Montecristi, el ex Presidente General Pedro Santana.

    En la ocasión el Gobierno Provisional del Cibao, Presidido por el General José Desiderio Valverde, con el vicepresidente Benigno Filomeno Rojas, dirigía un movimiento armado para derrocar al Presidente Buenaventura Báez, quien resistía en Santo Domingo.

    El Gobierno fue formado el 7 de julio de 1857, al iniciarse en la Fortaleza San Luis de Santiago, lo que se conoce como la «Revolución Liberal del Cibao», que terminó con el Gobierno de Báez.

     Santana llegó el 25 de agosto de 1857 y de inmediato fue designado para que auxiliara con sus partidarios del Este a Juan Luis Franco Bidó, quien no había podido tomar la ciudad de Santo Domingo, porque  las murallas eran utilizadas por las fuerzas baecistas para protegerse.

    Historiadores dominicanos comparten la idea de que la medida en favor de Santana fue un error del Gobierno del Cibao, ya que aumentaría la resistencia de Báez por temor a Santana  y  colocaba al ex presidente en posición de retomar el poder.

          En efecto, ya el 18 de septiembre de 1857, había disminuido el papel del general Franco Bidó  y  Santana se convirtió en el dueño de la situación.

      El 25 de septiembre el Gobierno del Cibao al pueblo  para que eligiera a los diputados a partir del 7 de diciembre de 1857.  En ese momento los hombres de mayor capacidad intelectual en el Cibao deseaban producir una Constitución que permitiera un  Gobierno auténticamente democrático y representativo.

    “La nueva Constitución fue elaborada en Moca y proclamada el 19 de febrero de 1858”.

    La Constitución de Moca abolió la pena de muerte por motivos políticos y consagró como  derechos  la libertad de expresión, el libre tránsito y la libertad de reunión pacífica.

      La historiadora Mu-Kién Adriana Sang, en su obra Buenaventura Báez El Caudillo del Sur (1844-1878),  resalta que el Movimiento que se conoce  como “La Revolución de Julio de 1857”, tomó de sorpresa a Buenaventura Báez,  ya que en 1856, al asumir el poder designó al señor José María González como “agente secreto del Gobierno para vijilar  (sic) los actos del general Santana en Saint Thomas”, pero la selección del enviado no fue muy exitosa para Báez, pues parece que González era un hombre de Santana.

     Según el último informe de González, con fecha de 3 de julio de 1857, Pedro Santana era un hombre angustiado y en sus palabras no se le escapaba nada que pudiera revelar un plan.    En consecuencia, afirma que Báez, confiado en las informaciones suministradas por su informante, no imaginó que en el Cibao se gestaba un movimiento de gran magnitud  en su contra.   

La historiadora Mu Kién Sang expresa el criterio de que la Revolución del 7 de julio de 1857 fue un movimiento nacido en el seno de los llamados liberales, y en vista de su incapacidad militar y política, decidieron aceptar la ayuda de Pedro Santana, como jefe de la revolución y de las tropas rebeldes. La guerra duró casi un año, los grupos en conflicto lucharon con todos los medios a su alcance para salir victoriosos, acrecentando la violencia y la destrucción del país.  

    Anota que el triunfo de la revolución fue rotundo, Báez abdica al poder y parte rápidamente al exilio, pero el proyecto sería frustrado, pues el pensamiento liberal de los cibaeños sería opacado por la figura militar de Pedro Santana, quien volvería a la Presidencia en 1858 y desconoció la Constitución Liberal.    Así terminó frustrada la revolución de julio de 1857 y anulada la constitución liberal  de Moca.

En consecuencia,  Santana volvió a gobernar con la Constitución de 1854 que le garantizaba un Gobierno autoritario.