diariodominicano.com
MADRID, 9 mar (Xinhua) -- Tres mineros murieron la mañana de este jueves en el interior de la mina de ICL en la municipalidad catalana de Súria (noreste de España), después de que un desprendimiento de rocas los dejara sepultados.
Los bomberos locales confirmaron las muertes e informaron de que recibieron el aviso del incidente a las 08:53 hora local (07:53 GMT), e inmediatamente se desplazaron al lugar con nueve vehículos de rescate y un helicóptero medicalizado.
El accidente se produjo a unos 900 metros de profundidad en la mina de potasa de Súria, una localidad que se sitúa muy cerca de Barcelona, y las causas aún se desconocen.
Las tres víctimas trabajaban para la empresa ICL Iberia, encargada de la extracción, tratamiento y venta de potasa de la mina.
Al parecer, las víctimas se encontraban en una galería cuando el techo se desplomó sobre ellos. Actualmente, se está trabajando en la recuperación de los cuerpos y se ha enviado un equipo de asistencia.
Según representantes de ICL, en principio no habría más trabajadores afectados, aunque la empresa destacó que es necesario que los equipos lleguen al lugar de los hechos para realizar una valoración.
El presidente de la Generalitat de Catalunya, Pere Aragonés, ha expresado su "apoyo a las familias de los mineros afectados y a sus compañeros de la mina" y ha calificado el suceso de "trágico accidente".
La actividad en la mina, como es habitual en los casos de accidentes mortales, ha quedado detenida totalmente y los mineros que no están involucrados en el rescate de los cuerpos han dejado ya las instalaciones en señal de luto, que se alargará 24 horas.
Los dos últimos accidentes con trabajadores muertos en las minas de ICL tuvieron lugar en junio de 2020, con tres semanas de diferencia entre uno y otro.
