Dominicana Hoy, Portada

Bahoruco exige y merece mayor atención

Dr. Jottin Cury

El pasado 12 de noviembre participamos en una interesante y concurrida actividad académica que contó con los auspicios de la Universidad Abierta para Adultos (UAPA), Solidaridad Internacional, la Oficina Senatorial de Bahoruco y la Cámara de Comercio y Producción de esa hermosa provincia. El evento se llevó a cabo en el recinto del referido centro educativo en Neyba, que es la capital de la provincia, con la asistencia de profesionales y figuraras representativas de esa laboriosa comunidad.

Se abordó como tema central la evolución de los derechos humanos en la República Dominicana y el papel que ha desempeñado el Tribunal Constitucional dominicano. Sin embargo, al iniciarse la etapa de preguntas y respuestas al final de la charla, en la que se produce la interacción con el público, surgieron otras inquietudes que perturban no solamente a la comunidad de Neyba, sino a todos los dominicanos: me refiero a la problemática migratoria con ocasión de la actual crisis por la que atraviesa Haití.

Sobre el problema haitiano he escrito y continuaré pronunciándome, pero en esencia se trató sobre el esfuerzo que realizan las autoridades para controlar los efectos que genera esa situación en nuestro territorio. Asimismo, se abordó la indiferencia de la comunidad internacional y las  estrategias que debemos implementar con la finalidad de que no nos dejen solos en esta peligrosa

encrucijada que amenaza la estabilidad en toda la isla. Definitivamente que mientras las fuerzas lo permitan, seguiremos pronunciándonos sobre ese delicado tema. Ahora bien, el propósito de este trabajo es destacar las obras que se necesitan en esa comunidad que se encuentra enclavada en el mismo corazón de la región sur. Sus habitantes reclaman, con sobrada razón, el auxilio del Gobierno central y sus instituciones para que se construyan diferentes obras que impulsarían el desarrollo agrícola de la zona. Por ejemplo, se precisa de una zona franca para generar empleos, así como la construcción de un dique para represar las aguas del río Panzo, la cual servirá para la expansión del cultivo de las uvas que ya se está industrializando para beneficio del país. El mercado del vino se está abriendo afortunadamente para los productores de la región.

En ese mismo orden de ideas, se necesita reparar caminos vecinales para facilitar el transporte de

personas y mercancías, así como apoyar el proyecto de crianza de peces de la Asociación de  Madres Merced El Tamarindo en Galván. que se encuentra en virtual estado de abandono. Igualmente se

necesita la construcción de acueductos, de un parque industrial para procesar diferentes rubros

agrícolas que son de consumo masivo, y del tramo de carretera comprendido entre el Batey 2 y Santana que ahorraría tiempo y combustible para los que transitan hacia o desde la capital, entre

otras

La señalización de las vías de acceso es otra de las prioridades para incentivar el turismo en una

zona que cuenta con balnearios de inigualable belleza. Algunos hijos meritorios de la comunidad

han abogado por estas iniciativas que se esperan sean anunciadas en el Consejo de Gobierno previsto para el próximo 20 de noviembre en Neyba. Importantes personalidades como el empresario Miguel Issa Lama, Carlos Matos, José Lara, Alexandra Amador y la propia gobernadora

de la provincia, solicitan la ayuda de las autoridades cada vez que tienen la oportunidad.

En definitiva, es hora de que el sur despegue económicamente. Para ello es preciso que se inviertan los recursos necesarios para crear las condiciones mínimas de su desarrollo. En otros polos turísticos con menos condiciones naturales se han colocado cuantiosas sumas de dinero que han facilitado su expansión. Por tanto, debemos hacer todo lo que se encuentre a nuestro alcance para impulsar el desarrollo de una de las zonas más hermosas del país, la cual posee excepcionales atributos naturales. aunque desafortunadamente ha sido olvidada tanto por los gobiernos como por el sector privado. Es hora de que esta empobrecida región reciba la atención que merece y reclama desde hace años