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Por David La Hoz
Santo Domingo, R. D., 3 de septiembre, 2021.- La crisis mundial de 2008 mostró que el modelo neoliberal había quedado agotado, sin embargo, seguía manteniendo a Chile como meca, Colombia era también un modelo a seguir, al igual que El Salvador o México, pero ya esos tiempos han pasado y todos han entrado en crisis incluyendo a los de Europa y al propio Estados Unidos. Por eso apareció el modelo pragmático de Donald Trump, por eso el Brexit inglés, etc. Por eso en México está gobernando AMLO, por eso en el Salvador gobierna un pragmático, un populista, como afirman despectivamente los neoliberales.
La República Dominicana se presenta ahora como el país donde el neoliberalismo podría tener una segunda oportunidad, por intermedio de la asociación público-privada que es vista como el buque insignia del proyecto neoliberal de Luis Abinader, pero, la pandemia del covid 19 hace impracticable la vieja receta neoliberal de condenar al ostracismo, en su propio país, a sectores medios que habían conseguido cierto estándar o calidad de vida.
Luis Abinader toma conciencia de la poca viabilidad del proyecto neoliberal con el que se ha comprometido. De ahí que, al quedar sin propuesta, al presentar un gobierno agotado en tan solo un año, busca que el sistema de partidos le ayude a enfrentar la dificultad por la que atraviesa. Es dudoso que obtenga lo que busca porque lo que mal comienza, mal termina, dice el adagio popular. Es decir, Luis, quizás por novatada, no se ha dado cuenta de que su proyecto de gobierno de unidad nacional, para ser viable, requiere la exclusión del danilismo, pues su principal bandera y su éxito cuantificado y cuantificable, es su campaña anti corrupción, pero, la negociación con el danilismo implica renunciar a ella.
¿Cómo asumirá la opinión pública la renuncia a la política anti corrupción y la propuesta de modificación a la constitución cuando la misma pasa por el tamiz de la rehabilitación política de Danilo cuando la población y el propio PRM, lo que esperan es que lo procesen judicialmente?
Es decir, Luis se ha auto desarmado frente a la oposición y frente a su partido ¿cómo reencausar entonces su gobierno? ¿Con una reforma fiscal en medio de una crisis dentro del covid 19? Llegado a este punto, obviamente, Luis se ha decidido por un dialogo al cual llega muy debilitado. En este contexto, la situación política luce muy difícil para el joven presidente.
Una mirada a los puntos de conversación propuestos indica que todos son de difícil aplicación, de difícil consenso, por tanto, ganaría algo de tiempo pero al final, los resultados serían muy limitados, lo que equivale a una victoria pírrica en medio de una crisis económica.
Las soluciones de Luis serían obtener una moratoria en el pago de la deuda, que es su problema real, un relanzamiento de su gobierno con una composición más equilibrada y el fortalecimiento de su política anti corrupción junto a la solución de problemas como la seguridad social. La creación de empleos mediante el relanzamiento de la producción nacional, sobre todo, en materia alimentaria tanto para el abasto nacional, lo que implicaría sustituir importaciones, e incluso, exportar de manera particular, en lo referente al mercado que ofrece el DR-Cafta.
Porque el mercado interno presenta situaciones realmente contradictorias, productores que se quejan porque sus precios son exiguos, mientras los consumidores manifiestan que los precios de los principales rublos son elevados. Ahí hay una contradicción que el Estado está en capacidad de enfrentar exitosamente, si se lo propusiera, es decir, si no tuviese importadores al asecho.
En otras palabras, Luis está obligado a reorientar el modelo neoliberal hacia otros horizontes o la crisis económica que ya pende sobre el país, acabará convertida en crisis de gobernabilidad. Quizás sea en este punto donde se le ha ocurrido al presidente, el dialogo como salida junto al sistema de partidos. Pero ¿qué podrán plantear esos partidos como no sea ventajas particulares para ellos mismos? Debido a esto, es que, hemos planteado que el presidente ha debido buscar alianza en el sector social. Es una pena que el Consejo Económico Social (CES), sea convertido en una tribuna de los partidos cuando su esencia es ser una tribuna de la sociedad, de movimientos sectoriales que pueden aportar más que los partidos a los objetivos del presidente.
No lo hace quizás porque lo social implica una ruptura con el modelo neoliberal. Pero no hacerlo, implica pagar un precio político bastante alto. De ahí la frase popular de que permanecerán cuatro años y se van.
De nuevo, la sociedad dominicana pierde una oportunidad de avanzar hacia la institucionalidad una sociedad que esperaba que no se hablase, de reforma constitucional, sin embargo, ese indicador se ha venido abajo por voluntad unilateral del presidente, cuando nunca se esperaba que, precisamente, viniese de él, tal propuesta.
El PRM es un partido preocupado por ocupar plazas públicas no por cambiar nada. Ahí está otra limitación del presidente. Es probable que los del partido de gobierno estén esperando su oportunidad de cargarse los recursos públicos. Por eso, seguimos planteando la necesidad de una alianza, de un dialogo con la sociedad, ante de que sea demasiado tarde. La seguridad social, la reformulación del sistema de las ARS, las ARL y las AFP, son claves en el éxito del gobierno. Todavía se está a tiempo de evitar una debacle.
Se avecina, un fuerte debate público originado en el destino y rentabilidad del 4% destinado a educación y sus bajos resultados, como al deplorable estado de los planteles escolares, la falta de conexión a internet y la no posesión de equipos esenciales para la educación en línea de la mayoría de los escolares dominicanos ¿qué respuesta tiene el presidente para este caso? Los días por venir indicarán que, hace rato que se debió iniciar un dialogo con el sector educación y con los padres y amigos de las escuelas, sobre la tanda extendidas y con los suplidores de estas. Pues está claro que la escuela requiere un refuerzo en arte, cultura y deporte ¿sobre cuáles bases y bajo cual procedimiento? He ahí un nicho que el presidente ha debido tomar y lo ha dejado de lado. LH-1-9-2021
